El partido socialista y Compromiso por Gran Canaria defendieron ayer la titularidad pública del hotel Santa Catalina por encima de cualquier operación de compraventa de acciones que realice la actual arrendataria del establecimiento turístico Hotelera Nueva Canarias con la cadena noruega Radisson, tal y como público el domingo este periódico. Los dos partidos de la oposición culparon al grupo de gobierno de la situación y ya han solicitado al ayuntamiento que clarifique lo qué está pasando con el emblemático hotel.

El empresario Juan Padrón, actual arrendatario del hotel Santa Catalina bajo la empresa Hotelera Nueva Canaria SA, habría negociado con Radisson la venta del 75% de sus acciones a cambio de 2,5 millones de euros el pasdo 27 de junio. Al acuerdo suscrito le faltaría aún el visto bueno del ayuntamiento, ya que es la propitaria del histórico inmueble.

Este periódico trató ayer de ponerse en contacto con algún responsable municipal para conocer si la operación habría contado con el visto bueno del ayuntamiento sin obtener respuesta. Lo mismo ocurrió con el portavoz de Nueva Canarias, otro de los grupos de la oposición municipal, para conocer su opinión.

La presidenta de Compromiso por Gran Canaria, Nardy Barrios, acusó al alcalde del municipio, Juan José Cardona, y al concejal de Promoción Económica, Turismo y Ciudad de Mar, Pablo Barbero, de provocar esta situación al abrir un debate público sobre el estado de las instalaciones hotel, que al parecer no estarían en perfectas condiciones.

"Han sacado un debate a la opinión pública que debería de haber ido al consejo de administración de la sociedad - en el que están representados todos los grupos políticos del ayuntamiento- que gestiona el hotel", indicó Barrios.

La presidenta acusó al alcalde Cardona y al concejal Barbero de "ir de listillos y de ningunear a Padrón" y que esta situación podría haber llevado al empresario, que gestiona el hotel Santa Catalina asta el 2017, a "adelantarse al ayuntamiento si éste no le ha dado una salida".

Barrios afirmó que Juan Padrón puede hacer lo que quisiera con su empresa Hotelera Nueva Canaria SA, pero que habría que estudiar en "qué condiciones y con qué limites" se hizo el contrato de concesión para ver si la operación de compraventa puede continuar hacia adelante. Compromiso por Gran Canaria ya ha solicitado la convocatoria "urgente" del consejo de administración de la sociedad que gestiona el hotel.

El concejal socialista Sebastián Franquis, por su parte, acusó también al alcalde y al edil de Turismo de no haber sido "cautos" en todo este asunto. "Todo el mundo habla del futuro del hotel y los responsables ni están ni se los espera" dijo.

"El ayuntamiento es el único que puede hablar del futuro del hotel aquí nadie puede hacer negocios", recalcó Franquis.

El concejal socialista mostró su preocupación por si la operación hubiera sido respaldada o avalada por el alcalde Cardona o por el propio concejal Barbero, que dirigió el hotel durante años, por lo que han solicitado la comparecencia en el pleno del ayuntamiento al concejal de Promoción Económica, Turismo y Ciudad del Mar. También presentarán una moción.

Franquis dijo que antes de hacer negocios sobre el futuro del hotel lo que habría que resolver es el "deterioro" que sufre el inmueble y obligar al arrendatario a emprender las reformas necesarias, si así fuera, para cumplir el contrato.