Los vecinos del barrio de Tamaraceite rechazan las obras para urbanizar Tamaraceite Sur, adjudicadas ayer, un plan parcial que creará más de 2.000 viviendas y un centro comercial. "Esto es un plan del siglo pasado, no supone sostenibilidad para la zona; es un suelo de gran valor que va a quedar sepultado por el cemento", señaló José Miguel Dumpiérrez, vocal de la Federación Las Medianías. Los residentes no parecen estar contentos con el desarrollo del plan.

"Tamaraceite, Tenoya y San Lorenzo no se merecen este maltrato, sino un proyecto sostenible y de futuro", indicó Dumpiérrez. Insistió en que el plan "va a quitar lo más valioso que es el paisaje y el entorno". Parte de la preocupación de los vecinos radica en la implantación de un gran centro comercial. Esto implicará una "masificación y va a hundir el pequeño negocio", agregó Juan Calderín, presidente de la asociación de vecinos Aythami. Lo que conlleva un gran almacén como el que se quiere ejecutar "ya lo tiene la zona", así "hay que consolidar el área comercial abierta y ayudar a los pequeños negocios que crean empleos de calidad", concretó.

Por otra parte, el Ayuntamiento anunció ayer que ha firmado un acuerdo con BP para trasladar la actual gasolinera de la carretera de Teror, en la salida de Tamaraceite, a otra parcela unos metros más alejada de su actual ubicación, junto a la salida de la futura urbanización Tamaraceite Sur.

En su lugar se levantará una gran rotonda que ocupará el espacio de la actual rotonda y de la gasolinera. Esta rotonda gigante servirá para distribuir el tráfico que proceda de la nueva urbanización, el que circula por la Cruz del Ovejero y el de las guaguas que salen del vecino intercambiador.