Los arquitectos de Gran Canaria reúnen firmas para presentarlas al Gobierno autónomo e iniciar un expediente de segregación del Colegio Oficial de Arquitectos de Canarias (COAC). El objetivo es constituir un órgano de ámbito insular, totalmente independiente del regional. Fuentes del colectivo explicaron a este periódico que la iniciativa se justifica por una deuda de tres millones de euros contraída por la demarcación de Tenerife, que consideran que puede lastrar a los profesionales de las demás Islas.

La Demarcación grancanaria ha remitido a sus 1.000 colegiados un escrito para que estampen su firma y su DNI, con el fin de trasladar el resultado a la Consejería de Presidencia, que es la instancia competente para completar el proceso. El escrito se ampara en la Ley Canaria 277/1990 de Colegios Profesionales y en el decreto 277/1990, que recoge el reglamento, y especifica que serán los colegiados grancanarios quienes asumirán "las cargas patrimoniales que se deriven de esta segregación".

"Para que se pueda llevar a cabo la separación es necesario que dos tercios del censo de colegiados estén de acuerdo", explicó ayer Teófilo González, director general de Relaciones Institucionales y Participación Ciudadana del Gobierno de Canarias. Hasta el momento, la Demarcación de la Isla sólo ha enviado a la Consejería una solicitud de informe sobre el procedimiento a seguir y, una vez aclarados los detalles, la semana pasada envió la encuesta a sus asociados, que la pueden descargar de la página web del Colegio. "Existe un precedente, que es el del Colegio de Ingenieros, que tomó esta vía para la segregación", aclaró González.

Reivindicación

La reivindicación de separación de los colegiados grancanarios es antigua, ya que, aunque cada demarcación (Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura) tiene independencia económica y patrimonial, todas conforman una única personalidad jurídica, lo que deja la puerta abierta a compartir responsabilidades económicas.

Fuentes del Colegio señalaron que "Gran Canaria no debe ni un euro". "Estamos haciendo un esfuerzo superlativo por reducir gastos, hemos pasado de una sede de 1.000 metros cuadrados, que costaba 5.000 euros al mes, a una de 250 metros, que ya era nuestra en gran parte. El presupuesto de cinco millones al año ha pasado a un millón de euros al año, eso significa una reducción del gasto de un 80 % Ha sido duro, pero tenemos que adaptarnos a la nueva situación, no sólo por la crisis, sino porque las estructuras estaban obsoletas", indicaron las fuentes.

A pesar de todo eso, la cuota colegial de la Demarcación insular es la más barata de toda España, ya que asciende a 22,95 euros al mes. "Tenemos el 10 % de ingresos de los que teníamos hace cinco años y eso hay que afrontarlo, no se puede pensar que podemos funcionar con las estructuras del siglo XX", continuaron las fuentes del Colegio profesional. La Demarcación de Tenerife, sin embargo, tiene unos 600 asociados y una sede de grandes proporciones, además de una deuda de tres millones de euros que no están dispuestos a afrontar los arquitectos de Gran Canaria.

Por tanto, la separación de las cuentas no garantiza, como se ha dicho, que puedan existir "daños colaterales" de las actuaciones del resto de demarcaciones, pero es que, además, los profesionales grancanarios consideran que los equilibrios no son del todo adecuados. "Tenemos el 5 4% de los colegiados y el 20 % de representación, como sucede en muchos otros ámbitos en el Archipiélago", señalaron.

En un primer momento se intentó la vía de la segregación estatutaria, que, en principio, ha sido desestimada por el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos de España.

Aunque hay un grupo de colegiados de Gran Canaria que no quiere descartar esa opción, la Demarcación ha tomado la decisión de "pulsar la opinión de los colegiados para seguir tomando decisiones". De este modo, aseguran desde el Colegio que no tienen la intención de imponer ninguna de las vías. "Nosotros nos hemos visto obligados a preguntar al colectivo qué es lo que quiere hacer y con ese resultado veremos qué camino tomamos".

La Demarcación de Gran Canaria no pretende, en absoluto, desenterrar el hacha del pleito insular. Es más, tiene la intención de potenciar un órgano de comunicación y colaboración que funcione con una nueva estructura. "Estamos convencidos de que sería bueno que se constituyera un Consejo de Colegios de Arquitectos de Canarias del que formaríamos parte todos, aunque con independencia de la personalidad jurídica", concluyeron las fuentes colegiales.

La semana pasada se habían firmado unas 40 cartas y en un par de meses se dará por concluida la encuesta. Si se logran los dos tercios del censo de acuerdo con la segregación se iniciará el pro-ceso en la Consejería de Presi-dencia, que abrirá el expediente correspondiente.