El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Cardona, reiteró ayer durante la celebración de un consejo de administración de la empresa mixta de aguas Emalsa, su total oposición a una revisión de tarifas en un futuro próximo a causa de la eliminación por parte del Gobierno central de la subvención a la producción de agua desalada.
El alcalde trasladó a los representantes de los socios privados de Emalsa, Saur y Sacyr-Vallehermoso, su postura contraria a la actualización de tarifas durante la parte informativa, y no la vinculante, de la sesión celebrada ayer. Estos empresarios mostraron al regidor su preocupación por la posible pérdida de beneficios al desaparecer las ayudas estatales y le pidieron que intercediera ante la administración central para tratar de recuperar la subvención.
"Todo eso se trató de manera informal, no hubo ningún acuerdo ni decisión sobre el tema, los empresarios preguntaron y el alcalde les recordó su postura de que la actualización de tarifas no va a depender nunca de la subvención a la producción de agua desalada porque la empresa tiene margen para adaptarse a esa supuesta reducción de la ayuda que aún está por ver", explicó el concejal de Medio Ambiente y miembro del consejo, Ángel Sabroso.
Además de las cuentas de la empresa, el consejo de administración aprobó ayer la sustitución de la hasta ayer directora general, Laura Rivero, por la gallega Mercedes Pino Fernández-Couto Gómez, licenciada en Farmacia por la Universidad de Santiago de Compostela y delegada de Gestagua (Gestión y Técnicas del Agua) en Galicia.
Este nombramiento forma parte del acuerdo entre los socios privados de Emalsa por el que cada tres años se alternan su representación entre la Dirección General, que ahora ocupa Sacyr, y la Dirección Financiera.
