Borjana SL, la empresa que se ofrece a reconvertir la parcela del viejo Estadio Insular en un parque, ha propuesto al Cabildo de Gran Canaria - propietario del inmueble - pagarle un canon anual de al menos 600.000 euros por la explotación deportiva y comercial de la futura instalación. Esta anualidad supondría unos ingresos de más de 20 millones de euros para las arcas del Cabildo durante los más de 30 años que esta empresa explotaría el parque comercial y deportivo.

Borjana especifica en la propuesta enviada al Cabildo el pasado verano, de apenas dos folios, que la reforma del viejo estadio en un parque público y las antiguas gradas en zona deportiva y comercial tendrá un coste de 27 millones de euros, dinero que la firma se compromete a buscar en bancos o inversores. A cambio de invertir los 27 millones, Borjana reclama al Cabildo la gestión y explotación de todos los recursos que genere el nuevo parque del Estadio Insular durante 35 años. "Consideramos el plazo de explotación razonable acorde a la inversión a realizar", recoge el escrito presentado por Borjana al Cabildo el pasado 9 de julio.

Además de este desembolso de 27 millones, la firma en la que figura como administrador el empresario Rafael González Bravo de Laguna, se ofrece a pagar un canon anual al Cabildo por la explotación del parque. Así, Borjana pide un periodo de carencia de dos años, tiempo estimado en realizar las obras y poner en marcha las infraestructuras y empezar a pagar el cánon a partir del tercer año de la firma del acuerdo. Para el pago de ese primer cánon se estipulan como apropiados 300.000 euros repartidos en 12 mensualidades de 25.000 euros. El cuarto año de explotación y segundo de pago del canon este se elevaría a 420.000 euros, 35.000 mensuales. Es a partir del quinto año cuando se establece la cantidad casi fija de 600.000 euros, 50.000 mensuales. A partir del sexto año de explotación, y hasta cumplir los 35 años, se pagarían esos 600.000 euros anuales pero actualizados con el IPC de los 12 meses inmediatamente anteriores.

Ingresos

La suma de estos pagos reportarían al Cabildo de Gran Canaria unos ingresos superiores a los 20 millones de euros por los 35 años de explotación, además de los 27 millones que se ahorraría la institución insular en realizar las obras de reforma.

El dinero del cánon que la propia Borjana se fija en su propuesta lanzada al Cabildo saldría de la explotación de los locales comerciales y deportivos que quedarían vacantes en los bajos de las actuales gradas. Uno de los equipamientos que más rendimientos podría dar a esta firma si finalmente se llega a un acuerdo con el Cabildo, sería la explotación del local para supermercado que albergaría la antigua Grada Naciente (la que da a Pío XII). Esta instalación cuenta con todas las bendiciones después de que la Cotmac aprobase el pasado lunes el Plan General Municipal (PGO) que consagra el uso comercial Tipo 2, el necesario para los supermercados.

Sin embargo, la joya de la corona del futuro parque, en lo que se refiere a rendimientos económicos, será el aparcamiento subterráneo con capacidad para 800 plazas que también explotaría Borjana.

Además de estas infraestructuras, la empresa de González Bravo de Laguna prevé construir en la parcela un campo de fútbol 7, diez pistas de pádel, gimnasios, restaurantes y todo tipo de tiendas. Borjana cobraría a todas estas instalaciones un alquiler para recuperar su inversión y pagar al Cabildo. Resulta llamativa dentro de la propuesta de Borjana la creación de un santuario de mariposas en un recinto abovedado, seguramente bajo la Grada Curva, que sería vaciada en gran parte de la arena sobre la que ahora se asienta.

Por último, la propuesta de Borjana incide en los puestos de trabajo que creen que va a crear su iniciativa. Según sus cálculos, una vez finalizadas las obras 20 personas serían empleadas para tareas de mantenimiento y gestión. Borjana suma a ellos otros 500 puestos de trabajo indirectos entre los servicios de vigilancia, lim pieza y empleados de los futuros negocios.