Casi medio millón de cruceristas llegarán a Las Palmas de Gran Canaria hasta el próximo mes de mayo, fecha en la que finaliza la temporada alta de este tipo de paquetes turísticos en la Isla, según las estimaciones del Ayuntamiento. Un gran pastel económico en el que los municipios del centro de Gran Canaria buscan también un nicho de mercado con el que capear la crisis y dinamizar la zona aprovechando los recursos paisajísticos, históricos, gastronómicos, artesanales y culturales que tienen las medianías. Empresarios y profesionales de San Mateo, apoyados por el Consistorio, ya han diseñado algunas rutas para los cruceristas, en las que también estarían implicados la capital y Santa Brígida.

El objetivo es que los cruceristas conozcan la Isla al margen del sol y playa en las pocas horas que recalan en la capital. ¿Y cómo hacerlo?. Pues muy sencillo, saliendo de la capital en guagua para conocer otros puntos de interés como el Jardín Canario, el Centro Locero de La Atalaya, la artesanía y el folklore de la Isla en el Mercado Artesanal y Agropecuario de San Mateo, alguna bodega de la zona, sin olvidar, degustar la rica gastronomía canaria a la hora del almuerzo. Y vuelta a la capital para coger el barco rumbo al siguiente destino.

Esta es a grandes rasgos la propuesta de San Mateo y que formulan conjuntamente el empresario turístico Alejandro Betes; el presidente de la asociación de empresarios, Pedro González; el arquitecto Juanma Febles; la dinamizadora Lucía Rodríguez, y el concejal Alexis Ramos. De ella se podrían beneficiar tanto compañías de transporte, restaurantes, artesanos, comerciantes, agricultores, guías turísticos, colectivos culturales, entre otros profesionales que directa o indirectamente podrían trabajar en este proyecto en el que también se quiere implicar al Cabildo Insular. En el municipio hay 900 desempleados que podrían formarse y participar de esta iniciativa.

"No solo cruceristas sino turistas, en general. La Palma, Tenerife y Lanzarote tienen perfectamente diseñadas visitas al interior y Gran Canaria está perdiendo una oportunidad de oro", apunta Alejandro Betes, dueño de GesturGran.

Los promotores de esta ruta por las medianías aseguran que sería una forma de descongestionar la capital de cruceristas - algunos días se concentran tres buques en el puerto de La Luz- y de ofrecer a los turistas otra visión de la Isla además de dar a conocer los productos agrícolas, gastronómicos y artesanales. Muchos de los cuales podrían ser objeto de exportación como la miel, repostería, los caldos, la joyería o los calados, por poner algunos ejemplos, tras ser degustados por los cruceristas.

"No solo se puede vender sol y playa. En Medianías hay muy poca inversión turística, todo se va para los grandes núcleos y nosotros tenemos un gran potencial en el sector agrícola con nuestros quesos, vinos y, otros productos; que podrían tener una gran salida. También en tradiciones. El mercado agrícola funciona muy bien los domingos, nos visita gente de toda la Isla, turistas, pero se podría aprovechar también entre semana", puntualiza el concejal Alexis Ramos, que señala que si se financiara el proyecto se podría reconvertir la nave, donde los domingos se pone el rastro, en un espacio para que los artesanos mostraran su trabajo y sus productos.

Los promotores del proyecto proponen que las rutas se realicen de lunes a viernes, cuando los municipios de Medianías funcionan con más tranquilidad para dar una mayor atención al crucerista. La ciudad se descongestionaría de turistas entre semana, mientras que el fin de semana continuaría con el proyecto de dinamizar las zonas comerciales aprovechando la llegada de los buques.

El presidente de la asociación de empresarios, Pedro González, en la que están asociados cerca de 70 empresas, la iniciativa contribuiría a recuperar clientes ya que se han perdido con "la aper-tura comercial de los domingos en Triana y en el Sur. El turista ya no viene a los pueblos en fin de semana".

Los integrantes del proyecto se conforman con que parte de los gastos medios que realiza un crucerista en la Isla -entre 70 y 150 euros- se queden en las Medianías. Y para ello buscan tanto la colaboración de la capital y de Santa Brígida además del Cabildo, quien incluiría las rutas en la página web de la entidad como paquete turístico con el fin de que los cruceristas pudieran contratar las rutas en el barco para poner en marcha todo el operativo antes de que llegaran a puerto.