La fisonomía del entorno del muelle de cruceros continúa mutando. Es la dinámica de los últimos meses, en los que la Autoridad Portuaria de Las Palmas ha impulsado la ejecución de varias mejoras en la zona. La principal, la construcción de nuevos accesos al muelle Santa Catalina, en donde atracan los grandes cruceros turísticos que llegan a la capital grancanaria. El proyecto consta de dos fases distintas, ambas ejecutadas por la compañía Acciona, adjudicataria de los trabajos por un importe de tres millones de euros. La primera está casi acabada, e incluye la renovación y ensanche del pavimento en la que hasta ahora ha sido vía principal para salir y entrar a los buques de recreo. La segunda no concluirá hasta, aproximadamente el mes de febrero, y consiste en una nueva carretera en la trasera del Centro Comercial El Muelle.

Este ramal, apto para el tránsito de peatones y vehículos y, en especial, de las guaguas que trasladan a los turistas, se ha concebido en principio como la nueva salida del muelle Santa Catalina. Actualmente, la obra está perfilada: queda ejecutar la escollera de protección de la vía, que se lleva cabo con rocas de gran tamaño que hay que traer de fuera de la Isla. Los tractores trabajan en estas fechas para habilitar la barrera y garantizar que el paso sea seguro.

En lo que atañe al que será el camino de entrada a los cruceros (el ya existente), allí se ha concluido un pantalán de unos 200 metros apto para el atraque de los súper yates que llegan a la ciudad. Sólo resta sustituir sesenta metros de pavimento (se ha colocado uno provisional) para que esta obra sea recepcionada por la administración, previsiblemente a mediados del presente mes de octubre.

Para mejorar el plan, el presidente del Puerto, Luis Ibarra, ya ha pedido a los propietario de El Muelle (Caixa Catalunya) una inversión que permita abrir una nueva entrada en el recinto comercial, justo por donde pasa el nuevo acceso en su fachada trasera. "Nos gustaría que los gestores del centro se decidieran, y que esta mejora pudiera llegar a tiempo junto con las obras que estamos haciendo", apuntó esta misma semana Ibarra, consciente de que semejante horizonte será complicado de alcanzar. Lo que es seguro es que El Muelle estará a partir de 2015 rodeado de cruceristas en tránsito por sus distintas fachadas.