Junto a Juan Plácido Pérez Navarro, presentó el lunes el libro Grupo Filatélico y Numismático de Las Palmas: 1948-2014.

El Grupo Filatélico y Numismático de Las Palmas ha hecho una gran labor no sólo en el coleccionismo, sino para hacer llegar el nombre de Gran Canaria en el resto de España y en el extranjero. Hemos tenido la suerte de tener aquí a los mejores coleccionistas del mundo. Don Nicolás Socorro Guerra, que fue uno de nuestros presidentes, quizás tenía la mejor colección de correo aéreo universal del mundo, y con ella estuvo paseando y prestigiando nuestra ciudad y nuestra Isla por todo el mundo.

Precisamente Nicolás Socorro Guerra fue una figura clave en los inicios de la entidad, cuando prestó su piso para la sede.

Sin duda. En los inicios se reunían en su casa, incluso antes de que se fundara el grupo. Después cuando empezaba a ser demasiada gente, pasó al Campo de España, que era propiedad del Señor Fuentes, y ahí se reunieron los primeros coleccionistas hasta que volvió a crecer demasiado el número, y entonces pasaron a reunirse en el Círculo Mercantil. Tuvieron que hacer infinidad de gestiones y lograron constituirse. En 1947 nombran una junta gestora para terminar los trámites, y enero del año siguiente ya se funda el Grupo Filatélico y Numismático, hasta 1951, que pasó a Triana donde estuvo más de 50 años.

¿Cuáles son los puntos que vertebran la publicación?

Se empieza con unos breves apuntes sobre la historia del correo, a nivel universal, después en España, y en Canarias. En las Islas tiene mucha importancia porque se diferenció de la Península, porque tenía sus prerrogativas. Canarias no pagaba las cartas hasta mucho más tarde que en la Península, estaban francas de coste, y tuvo muchas características especiales. Después le sigue los orígenes de la filatelia en Gran Canaria. No hay que olvidar que en nuestra ciudad se fundó la primera sociedad filatélica de España en 1879: el Centro Filatélico de Las Palmas de Gran Canaria. Años más tarde se fundó otra, Círculo Filatélico en 1900. Esta primera sociedad filatélica fue la primera de España y la séptima más antigua del mundo. Seguimos con los estatutos, todos los trámites burocráticos engorrosos para su fundación, las actividades del grupo, y las siguientes sedes que tuvo.

¿Y las exposiciones, como la Exfilna 1994 en Canarias?

Hay un capítulo extenso donde se detalla las dos nacionales, también la anterior, de 1977. Tuvieron una gran repercusión en las revistas especializadas y la prensa de la Península. También se organizaron 16 regionales, 15 provinciales.

En la más reciente que acogió Torremolinos del 28 de febrero al 2 de marzo, participó un socio de la entidad, Augusto Brosa, que ganó Medalla de Oro en la categoría de enteros postales, con su colección Gran Bretaña, tarjetas enteros postales victorianas. Emisiones 'Post Office'.

Sí, pero también hay otros coleccionistas muy importantes, como Domingo Doreste Ojeda, que fue uno de nuestros presidentes. Tiene una excelente colección de historia postal de Canarias, que recoge las primeras cartas que circularon con marcas postales en las Islas, y que ha obtenido premios nacionales e internacionales.

En su caso particular, ¿cuándo y por qué empezó a coleccionar estos trocitos de historia?

Desde muy pequeño, no es porque hubiese en casa nadie que reuniese sellos, pero me gustaron. Digo siempre que son unas obras de arte en miniatura, empecé con sellos de todo el mundo y ahora sólo reúno de Canarias. Tengo una colección, Avión Canarias, que hoy son quizás los sellos más interesantes del correo aéreo español.

¿Por qué?

Cuando estalló la Guerra Civil, Canarias quedó incomunicada con el resto del mundo, en cuanto a correo aéreo, entonces había una compañía, la Lufthansa, que hacía un servicio desde Sudamérica con escala en Gando. El administrador de correos de Las Palmas, con el permiso del Gobierno de Burgos, tuvo la posibilidad de sobrecargar los sellos de aquel momento, la República, con un sobrecoste para pagar a la compañía aérea el transporte de la correspondencia. Ésta la recogía en Gran Canaria y la llevaba a Sevilla, y allí se distribuía al resto del mundo. Se pensaba que iban a durar poco, pero al final fueron 51 sellos.

¿Cuántos sellos y monedas atesora el Grupo?

Tiene colecciones de matasellos, pero el grupo como entidad no tiene colección filatélica ni numismática, porque siempre se ha entendido que los coleccionistas son los que las deben tener, pero sí tienen unos fondos muy interesantes de medallística canaria. El grupo ha sido distinguido incluso con la Medalla al Mérito Filatélico en su categoría de plata en 1975. Y la primera exposición de monedas en Gran Canaria fue excepcional, la de Luis Aulet, en 1953. Para los filatélicos el valor de los sellos está en los que nos faltan, los que te duelen, porque no los puedes tener.

¿Cuál desearía tener?

Muy pocos, realmente casi tengo la colección completa, claro que se podía mejorar. Hay un matasellos que me encantaría tener, cuando se fundó la estafeta postal de Telde, había uno que ponía: Telde-Santa Cruz de Tenerife, de 1867. La prensa de aquí protestó contra él, porque decía que era una aberración. Lo tenía un italiano, Zuliani, y ahora es un coleccionista de Santa Cruz de Tenerife.

¿Cómo dan con esos tesoros?

El grupo es muy heterogéneo, la edad, religión, la clase social, no se tiene en cuenta. A veces consigues alguna pieza difícil en una subasta internacional a buen precio, después también hay intercambio con otros grupos filatélicos.

¿Desde cuándo ampliaron el abanico de coleccionismo a otros objetos, como marcadores de libros, postales antiguas...?

A finales de los 60 estaba en la junta directiva, y había gente que reunía muchas cosas y no tenían adónde llevarlas, como la vitofilia, los aficionados a las vitolas de puros, también a los banderines, las estampas, y ceniceros.

En el blog de la entidad aparecen antiguos matasellos sólo de la oficina postal de Agaete, como el de Cartería, el fechador para Valores Declarados, el de Cartería rural, Servicio Postal Especial para correspondencia certificada. ¿Planean incluir los de los demás municipios?

Nosotros siempre hemos intentado de alguna forma que el grupo esté presente, aunque no esté ahora mismo en la junta directiva, pero mientras yo estuve, que fueron más de 30 años, siempre intentamos de alguna forma estar presente en otros municipios. Así hemos organizado exposiciones en Telde, Guía, Teror. Nosotros veríamos con mucho agrado poder participar en otros municipios y poder abrir el mundo de la filatelia y numismática a la cultura de esas ciudades y pueblos de la Isla, que sabemos que se llevan trabajando cosas interesantísimas, pues también nos gustaría de alguna forma participar.

Una de las fechas más significativas marcadas en el calendario del grupo es el 1 de diciembre, San Eloy, patrono de los numismáticos, famoso orfebre de Francia en el siglo VII. ¿Tienen pensado organizar algo especial para celebrarlo?

Esas reuniones eran muy simpáticas y agradables, y servían para unir a los filatélicos y numismáticos. Las organiza un gran numismático, Manuel Ramos Almenara, que tiene una excelente colección. La verdad es que él buscaba todo y ha hecho un trabajo extraordinario. Desde 1985 el 1 de diciembre organiza la fiesta, a veces ha habido un año que no se ha podido celebrar. Si sirviera para animarlo, me sentiría feliz, porque es un genial organizador, trabajador, con gran humor en sus fiestas entrañables: una comida, intervenciones, regalos, rifas, de repente se inventaba un bingo filatélico, además buscaba diferentes actividades y cada año era una sorpresa.