El colegio privado Canterbury ha comprado por 2,35 millones de euros la antigua sede de Televisión Española en Canarias, ubicada en la Plazoleta Milton, en Ciudad Jardín. El centro pretende construir una escuela infantil en el antiguo chalet, que fue diseñado por el arquitecto Miguel Martín Fernández de La Torre, y ya cuenta con la autorización del consejo municipal de patrimonio histórico para rehabilitar el chalet y reformar el edificio trasero. El centro educativo adquirió el inmueble, al ofertar 59,41 euros más que el precio por el que salió a subasta el edificio en marzo del pasado año, tras quedar ésta desierta.
Un portavoz de la Delegación del Gobierno de España en Canarias confirmó ayer la adquisición del chalet por parte del Canterbury School. Desde el Ministerio de Hacienda confirmaron que la venta se acordó tras quedar desierta la subasta el pasado mes de abril, porque nadie se interesó. Las mismas fuentes indicaron, a través de un comunicado, que el Canterbury ofreció posteriormente 2.350.000 euros, "cantidad ligeramente superior" a la de la licitación, cifrada en 2.349.940,59 euros, "por lo que se le pudo adjudicar directamente".
El consejo municipal de patrimonio histórico aprobó el pasado 30 de enero la rehabilitación, reforma y cambio de uso a educativo de la vieja sede de TVE solicitada por el centro, un visto bueno que está condicionado a la corrección de una serie de deficiencias que los técnicos detectaron en el proyecto presentado.
La protección integral que tiene el chalet impide cualquier actuación en el edificio, salvo su rehabilitación. La principal actuación que prevé el centro educativo para instalar la escuela infantil está localizada en el edificio trasero del chalet, que fue añadido en la época en la que albergaba la sede de TVE en Canarias, y que no tiene valor patrimonial alguno. El edificio tiene dos plantas, una buhardilla y sótano y una superficie total construida de 1.519, 20 metros cuadrados, situada en un terreno de 2.158,43 metros cuadrados.
Está previsto que el edificio trasero, donde se situaron los estudios de grabación, sea derribado para construir en su lugar uno nuevo. Y ha sido esta obra la que ha provocado las mayores reservas del consejo, ya que el inmueble diseñado sobresale a lo ancho y distorsiona la imagen del chalet protegido. Por esta razón, el órgano ha condicionado la reforma a que se disminuya el volumen del inmueble anexo, entre otras cuestiones de menor entidad.
