"El espacio en el que lo han hecho me encanta, está todo muy bien decorado; se respira la Feria de Abril y el encendido les ha quedado lucidito", opinó anoche la vecina de La Isleta Carmen Robaina durante la inauguración de la octava edición de la Feria de Abril en Las Palmas de Gran Canaria, en la que, por primera vez, se procedió al tradicional encendido de bombillas, típico de esta celebración. En esta ocasión fueron más de 2.000 bombillas las que se encendieron en la Plaza Islas Canarias, en la trasera del Parque Santa Catalina -en la zona del Intercambiador-, donde se situó un escenario que hará las veces de tablao flamenco hasta este domingo, cuando finalizan los actos correspondientes a la Feria de este año en la capital.

La propia Robaina hizo especial hincapié en que el emplazamiento escogido es el ideal para disfrutar de esta fiesta. "Otros años se ha hecho en otros sitios, pero este es el mejor de todos; el escenario, además, está mejor que el del año pasado", comentó la isletera, amante de la cultura andaluza. "He estado en la Feria de Abril en Sevilla varias veces y habitualmente asisto a clase de sevillanas; me encanta", añadió.

Cerca de ella, entre el público, se encontraba también una tocaya suya, Carmen Suárez, natural de Arucas, que tampoco quiso perderse el espectáculo. Y ella, como gran parte de los presentes, acudió ataviada con el traje típico de Sevilla. Respecto a la novedosa iniciativa del alumbrado, le resultó "maravillosa", y sobre la propia Feria, opinó que "me encanta que se haga porque transmite alegría y se da a conocer la cultura de Andalucía, tan parecida a la nuestra".

El encargado de accionar el interruptor que iluminó las filas de bombillas situadas sobre el público y que supuso el arranque de la Feria fue Pablo Barbero, concejal de Turismo del Ayuntamiento, que estuvo acompañado por Carolina León, edila del Distrito Isleta-Puerto-Guanarteme, y Juani Hernández, presidenta de la Asociación Cultural Feria de Abril y encargada de organizar la celebración junto a Teresa Deudero, directora de la empresa Ylang Ylang que también colaboró en esta edición. "El reto es hacerlo cada año mejor, y en cualquier Feria de Abril que se precie, el farolillo es imprescindible, aunque hasta ahora no habíamos podido introducirlo. El que hemos hecho es un encendido bastante modesto, pero para nosotros es un gran encendido y queda muy bonito", declaró Hernández.

"Esta edición es bastante especial", prosiguió, "se puede mirar alrededor y ver que está mucho más elaborada, mucho más cuidada y mucho más flamenca. Esta es una iniciativa que tiene que continuar; aquí hay mucha afición por Andalucía, quizás por tener una idiosincrasia parecida a la de ellos, yo creo que gracias al sol".

Antes de procederse al alumbrado, sobre el escenario se llevó a cabo un espectáculo de folclore andaluz. Tras esto, se dio paso a una pasarela de modistas flamencas y un espectáculo a cargo de la compañía Embrujo, de Vecindario, que fusionó el baile flamenco y la magia. Esta primera jornada finalizó con la Noche del pescaíto, en la que los participantes tuvieron la posibilidad de degustar la gastronomía típica de estas fiestas que se sirvió en los numerosos chiringuitos distribuidos en la zona del parque.

Hoy continúa la Feria con una gala ofrecida por los ballets de Arte Español, Paulina y Javier de El Real a partir de las 20.30 horas. Las actuaciones se desarrollarán hasta medianoche con los coros de Toñi Medina, Ellas se gobiernan solas, Soli La Pura, Juan de Dios Simón El vaquerito y Brisa Marismeña.