"El alcalde no es nadie para decidir a qué ciudadano debe beneficiar esta medida y a cuál no", valoró Juan José Cardona, portavoz del Grupo Municipal Popular del Ayuntamiento capitalino, respecto al anuncio del regidor, Augusto Hidalgo, de reducir el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) el próximo año que favorecerá a más de 23.000 familias con escasos recursos económicos. "Podrían aplicar por igual a todos los ciudadanos la rebaja del 10%, pero optan por un mecanismo que genera molestias a todos, ya que cualquier ciudadano puede considerarse con derecho a esta rebaja", agregó Cardona.
Según el portavoz del Partido Popular en la oposición, "este tipo de decisiones tienen más propósito de quedar bien que de verdad ayudar a la gente, ya que nosotros no habíamos podido reducir el IBI porque había una prohibición estatal que ahora desaparece".
"Hidalgo", continuó, "busca un efecto inmediato de generar una sensación en los ciudadanos de que se les va a ayudar. Pero es una solución que no es real, y del dicho al hecho va a haber un gran trecho en este caso. Además, eso de subvención automática es una falacia, puesto que se pondrá en marcha un mecanismo burocrático que va a ocasionar más costes a estos ciudadanos que lo que se van a ahorrar".
Asimismo, el exalcalde calificó de "brindis al sol" y de "populista" la medida adoptada por Hidalgo, "que ha vuelto a suscribir su negativa y renuncia y la del gobierno tripartito que lo acompaña a realizar una rebaja generalizada del 10% del IBI a todos los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria, según lo tenía previsto la anterior corporación municipal en el presupuesto municipal, desde que el Decreto de ámbito nacional lo permitiera". El argumento que había expuesto el regidor para no reducir el IBI un 10% para dejarlo como en 2011 es que supondría una pérdida de más de siete millones de euros a las arcas municipales.
Por su parte, la portavoz del grupo municipal de Unidos por Gran Canaria, Ángeles Batista expuso que la gestión mantenida hasta ahora por el tripartito "nos alarma", puesto que "en el mandato en el que Benito Cabrera fuese concejal de Hacienda, por el año 2009, el gobierno del PSOE subió este impuesto un 30%".
"Como ya hemos denunciado en varias ocasiones", prosiguió, "sigue sin cobrarse este impuesto a grandes superficies comerciales por una falta de voluntad política en instar la actualización en la inspección catastral. Con esta actualización se podrían sumar grandes cantidades de dinero a las arcas municipales consiguiendo con ellas que se reduzca el 10% del IBI a toda la ciudadanía de Las Palmas de Gran Canaria. Hay que gobernar para todos los ciudadanos, no solo para la mayoría".
