La muerte a golpes de la joven palmera Saray González, de 27 años, que estudiaba Relaciones Laborales en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), cumple hoy martes una semana. Mientras tanto, la Brigada de Homicidios de la Policía Judicial de Las Palmas continúa de lleno con la investigación, sin descartar ninguna hipótesis sobre el asesinato.

Los investigadores están pendientes de los resultados de los análisis relacionados con el ADN de la fallecida y de las pesquisas ya desarrolladas. Las indagaciones se han centrado en el entorno de la joven, así como en su teléfono móvil -en las llamadas y mensajes-. Los restos mortales de Saray fueron despedidos el pasado sábado por su familia y amigos en Santa Cruz de La Palma. Su cuerpo sin vida fue hallado el pasado martes 27 de octubre por su compañera de piso, en la calle Pérez del Toro, en la capital grancanaria. La puerta no fue forzada y presentaba también heridas de defensa.