Sin seguro, sin tarjeta de transporte, sin licencia municipal para conducir un taxi y con la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) falsificada. La Policía Local inmovilizó el pasado viernes el taxi de un flotero, al que le faltaban la práctica totalidad de los documentos necesarios para circular y, además, ha sido denunciado por un delito de falsedad documental, al coger la pegatina de la ITV de otro vehículo y pegársela al suyo.
El director general de Movilidad del Ayuntamiento capitalino, Heriberto Dávila, confirmó ayer que se trata de un taxi gestionado por un flotero, al que su departamento había abierto un expediente de revocación de licencia por explotación ilegal. Al expediente se le añadirán, aseguró Dávila, todas las irregularidades desveladas el pasado viernes, durante un control rutinario de seguridad vial de la unidad de Atestados. Fuentes de la Policía Local añadieron que la persona que conducía el taxi, -que también carecía de carné para conducir el vehículo de servicio público- es el hijo de la titular de la licencia y añadieron que el coche fue trasladado al depósito municipal de vehículos y allí se quedará retenido hasta que se haga frente al pago del seguro.
La falsificación de la tarjeta de la ITV constituye un delito que puede llevar aparajeda pena de cárcel, en el caso de que la persona acusada tenga antecedentes penales y una multa judicial, además de la de 200 euros que le impondrá el Ayuntamiento. Además, se enfrenta a otra multa de 1.500 euros por no tener el seguro obligatorio y entre 400 y 1.000 euros, por carecer de tarjeta de transporte.
Heriberto Dávila aseguró que se están realizando "inspecciones documentales" de los taxis, cada vez que los vehículos acuden al departamento de transporte para realizar gestiones como, por ejemplo, instalar publicidad.
Dávila reconoció que aún no se han iniciado las inspecciones que reclama un sector del taxi para comprobar si los titulares están registrados como autónomos y se dedican de forma plena a la actividad. "En nuestras inspecciones", aseguró, "pedimos toda la documentación. Aprovechamos que acuden para hacer otra gestión" para comprobar que tienen todos los papeles en regla. "Estamos en la idea de incrementar las inspecciones, que teníamos previsto iniciar con la prueba" de los dos días libres obligatorios, que está en suspenso desde hace más de un mes, al admitir los tribunales los recursos interpuestos por la Asociación de Asalariados del Taxi, cinco asociaciones de autónomos del taxi, y la Cooperativa de San Cristóbal.
Inspecciones
Por su parte, el presidente de la Asociación de Titulares de Auto Taxis de Canarias, Expedito Suárez, reclamó ayer al Ayuntamiento que inicie ya las inspecciones que anunció el concejal de Movilidad, José Eduardo Ramírez, hace un año. "Lo que ha pasado con ese taxi, que no tenía ni seguro, refleja que el Ayuntamiento está tardando en realizar las inspecciones. El sector necesita que se inicien las inspecciones documentales, en las que el titular acredite que tiene dedicación plena al taxi. Esta es la única manera de regularizar el sector; que se hagan inspecciones en todos y cada uno de los vehículos y nos consta que no se han iniciado. Ya sé que el departamento no tiene personal, pero si hubieran empezado a llamar uno cada día, habrían avanzado bastante. El Ayuntamiento no está haciendo nada", se quejó Suárez, cuya denuncia ha provocado la apertura de un proceso penal contra varios floteros.
Según aseguró Ramírez en noviembre del año pasado, en ese momento ya se había notificado la revocación de 86 licencias de taxis a sus titulares, por explotación irregular de la licencia, lo que no supone la retirada inmediata de la parada, porque los propietarios recurren en los tribunales y hay que esperar a la resolución judicial.
