Nuevo revolcón a la directiva en el Club Náutico. La semana que empezó con la derrota de los gestores en el Club Natación Metropole, terminó con la retirada de los planes de sus vecinos del Náutico.

Tras un año de gestión del equipo que preside Fernando del Castillo Morales, la asamblea de socios del Club Náutico de Gran Canaria celebrada el viernes por la noche ha rechazado las cuentas y las propuestas económicas propuestas por la Junta Directiva.

La votación que se sustanció por una escasa diferencia obligó al presidente a replantearse los asuntos que sometió al voto de la masa social. Votaron a favor de las cuentas 105 de los socios presentes. Lo hicieron en contra 112 y se contaron algunos blancos y nulos. La tensión se vivió de tal manera que se ejerció el voto secreto y no a mano alzada después de un acalorado debate. Más del 30% de los asistentes reclamó voto secreto. Y así fue como el presidente del Náutico y su directiva perdieron la votación.

El problema con que se ha encontrado Fernando del Castillo está, entre otros, en los "armadores", dueños de embarcaciones a los que se pretende modificar las tasas anuales que pagan por el enganche en la marina del Club.

Además, el malestar se ha trasladado también a un grupo de socios más veteranos a los que se ha vuelto a cobrar cuotas, tras modificar los estatutos del Náutico, y que lo han recurrido en los tribunales ordinarios al considerar que gozan de "derechos adquiridos" para seguir sin pagar y empezar a aplicar esa medida a los que ahora llegan a esas edades y a esos años de pertenencia a la entidad.

La situación económica del Náutico es lo que más ha motivado el debate. Los ingresos, pese a la incorporación de 416 nuevos socios, no han crecido como se esperaba.