Antonio Gustavo O. Q. ha sido condenado a 16 años de cárcel por intentar asesinar a su pareja conyugal el 16 de enero de 2017 en el interior del domicilio familiar en el barrio de San Roque de Las Palmas de Gran Canaria. El autor de los hechos asestó por sorpresa varias puñaladas a la víctima con un cuchillo hasta pensar que la mujer había fallecido. Durante la celebración de la vista, hoy en la Audiencia Provincial de Las Palmas, el asesino reconoció los cargos, por lo que la defensa y el Ministerio Fiscal llegaron a un grado de conformidad entre las partes.

Por el delito de asesinato en tentativa el reo será condenado por la jueza Pilar Parejo a 14 años de prisión. También se le imputarán otros dos años por malos tratos habituales en el ámbito de la pareja. Además, tendrá que pasar en libertad vigilada otros 10 años. La fiscal que atendió el juicio sugiere una indemnización de 180.000 euros. Al ser un caso de violencia de machista, Antonio Gustavo O. Q. tendrá que participar en programas de educación con perspectiva de género con la finalidad de reinsertarse en la sociedad.

En el transcurso de la vista el acusado renunció a su derecho a declarar y se mantuvo conforme con los cargos que le imputaba la fiscal. No obstante, al final del juicio decidió disculparse por los hechos de aquel fatídico día. "Pido perdón a mi madre, a mi hermano, a mis hijos, y en especial a la víctima", fueron sus palabras.

La víctima compareció por videoconferencia y se ratificó en las declaraciones que había mantenido hasta el momento. De esta manera, la fiscal evitó que la mujer volviera a revivir, una vez más, aquella "brutal agresión que le ha dejado severas secuelas". A los daños físicos provocados por las severas lesiones que sufrió aquel día se le suma el estrés postraumático.

La pareja se casó en 2008 y convivía con sus dos hijos, de 6 y 8 años. Según el escrito de acusación, la mujer vivió una humillación constante durante ese tiempo. Hasta tal punto que denunció ante la Policía Nacional hasta en tres ocasiones. Incluso, intentó marcharse a Colombia, su país natal, con sus hijos para escapar del calvario que estaba padeciendo.

Malos tratos continuados

La fiscal describió un ambiente plagado de "expresiones injuriosas y actos vejatorios". Además de mensajes "atemorizantes", compuestos por insultos, y una actitud claramente agresiva, con zarandeos y agarres con fuerza. Una situación que se prolongó en el tiempo, incluso en numerosas ocasiones en presencia de los niños. Por este "ataque de desprecio", la defensa de la víctima solicitó en la vista que se retire la patria potestad sobre sus hijos al acusado.

Uno de los testigos del intento de asesinato, vecino del barrio, aseguró que escuchó gritos de la víctima pidiendo auxilio. Fue entonces cuando vio "un revuelo" de personas entorno a la vivienda donde tuvo lugar el suceso. Allí se encontró con la mujer desangrándose y pudo hablar con ella, quien le dijo que el culpable fue su esposo.

Este vecino fue uno de los encargados de alertar a la Policía. "Cuando llegaron rompieron la puerta y él entró con pasividad", en referencia al acusado. Antonio Gustavo O. Q., tras dar por muerta a su esposa, se duchó y se fue de casa. Más tarde volvió al domicilio, acompañado por su madre y su hermano, para reconocer que apuñaló a la víctima en varias ocasiones, con la intención de acabar con su vida.

Incluso, el agente que se encargó de trasladar al asesino a disposición judicial testificó ayer que este mostró cara de "extrañeza" cuando le informaron que su esposa seguía viva, aunque había ingresado en un centro hospitalario en estado de extrema gravedad.

La víctima se hizo "la muerta" tras la última puñalada. Tras esto, su pareja se marchó. Aquel día ella volvía de la calle cuando se vio sorprendida por su esposo, quien portaba un cuchillo en cada mano, con hojas de 25 centímetros. El acusado la acuchilló, "serruchó" una parte del cuello y luego intentó asfixiarla. La mujer le dijo entonces que "prefería" morir desangrada, por lo que terminó de hundir el arma blanca en su pecho. Por suerte, Ketty logró sobrevivir este calvario.