El Puerto de La Luz quiere impulsar la apertura de la verja que separa el área industrial de El Sebadal de la zona de La Esfinge como solución parcial a los embotellamientos que sufre la rotonda de Belén María, por la que se accede tanto al recinto como al polígono industrial contiguo. La petición, largamente anhelada por diversos colectivos portuarios como la asociación de provisionistas de buques Provicanarias -lo han solicitado en repetidas ocasiones en tiempos recientes; la última vez, el pasado mes de abril-, será elevada por el presidente de la Autoridad Portuaria, Juan José Cardona, a la delegada del Gobierno, Elena Máñez, según explicó ayer el primero tras una reunión con el concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, José Eduardo Ramírez, para tratar temas portuarios que guardan relación con el área de gobierno que dirige.
"Las autoridades competentes tienen mucho que decir", indicó el presidente de los Puertos de Las Palmas en referencia a las distintas instancias dependientes de la Administración central, como la Guardia Civil o Aduanas, que tienen competencia acerca de la creación de un nuevo acceso a la zona. Subrayó, además, la plena disposición del Puerto a colaborar en este sentido con la Delegación del Gobierno y recordó que las administraciones "requieren de recursos humanos para poder garantizar la entrada y salida".
Aperturas puntuales
Es precisamente este problema, la falta de recursos humanos, el principal escollo que indicó la Guardia Civil para proceder a la apertura de esta puerta, según se ha asegurado en varias ocasiones desde Provicanarias. En este sentido, desde el Puerto se baraja en proponer aperturas puntuales en las denominadas horas punta de tráfico, aunque Cardona reconoció ayer la dificultad de llevar a término la propuesta: "Es un tema complejo ya que abrir más accesos complica la seguridad, es una situación que hay que plantear con prudencia", insistió.
El presidente de la Autoridad Portuaria consideró, en cualquier caso, que el alivio del tráfico en la rotonda de acceso al Puerto solo servirá "para llegar antes al atasco" si antes no se soluciona lo que definió como el "nudo gordiano" de la movilidad en la ciudad baja, el habitualmente atascado distribuidor de tráfico en cremallera que conecta la Avenida Marítima y el túnel de Julio Luengo a la altura de la Torre Las Palmas. "No nos podemos equivocar de prioridad", insistió.
Ramírez coincidió con Cardona al subrayar que "el principal problema" de movilidad en la zona baja de la ciudad radica a su juicio en la Torre Las Palmas "y eso ya está consensuado" a través de una propuesta que calificó como "técnica y sólida" que cuenta con consignación presupuestaria por parte del Plan de Carreteras. Más allá de la modificación de las infraestructuras, el edil incidió también en la necesidad de un cambio de cultura en la sociedad y en las empresas para plantear la movilidad de una manera más sostenible tanto en la urbe en general como en el espacio portuario en concreto.
Entre las medidas propuestas en este sentido, los representantes de la Autoridad Portuaria y el consistorio mencionaron la creación de planes de movilidad propios por parte de las empresas e incluso la organización de los horarios de salida de los trabajadores de La Isleta. Entre ellos, Cardona mencionó el caso de los militares que trabajan en los cuarteles cercanos: "Los miles de soldados que hay salen a la vez en coche privado", recordó.
La puesta en marcha de la futura línea 18 es otro de los elementos en los que tanto la Autoridad Portuaria como el Ayuntamiento coinciden a la hora de buscar soluciones a los continuos embotellamientos en el istmo y La Luz. El nuevo servicio, que arrancará después de las fiestas de El Pino, recorrerá el Puerto desde la plaza de Manuel Becerra hasta la rotonda de Mr. Park de lunes a viernes y con horarios adaptados a los principales flujos de trabajadores.
El encuentro entre Cardona y Ramírez sirvió también para tratar la situación del servicio de taxi en los entornos portuarios, sobre todo en cuanto a las operativas para recoger o dejar pasajeros en el Muelle Santa Catalina o junto a las terminales de Naviera Armas y Fred. Olsen. El presidente de la Autoridad Portuaria recordó que "son los primeros que quieren mejorar el servicio a cruceristas" El edil de Tráfico propuso, por su parte, "tratar de ordenar la entrada y salida" de estos vehículos con turistas y emplazó las posibles soluciones a una futura reunión con el sector en la que también participe la Autoridad Portuaria.
Fuera del orden del día de la reunión quedó, sin embargo, el traslado de las naves del Programa Mundial de Alimentos y la Cruz Roja para hacer hueco a los carriles de la Avenida Marítima tras el previsible cambio en su trazado que llegará como consecuencia de la implantación de la MetroGuagua. Cardona mostró la "disposición plena" de la Autoridad Portuaria para el traslado y Ramírez explicó que aún queda tiempo para tratar el asunto, ya que la mudanza de las instalaciones de ayuda humanitaria tendrán lugar solo cuando el proyecto de la línea de alta capacidad para esta zona se encuentre en ejecución. "La idea es que esa obra se comience a mediados de 2019 y que casi llegue hasta el final del proyecto", avanzó.
