Tal día como hoy hace un año las llamas devoraban el pesquero ruso Fin Whale en el Muelle de Sanapú. Los bomberos de Las Palmas de Gran Canaria lucharon contra el fuego para sofocar el fuego y evitar un vertido de 40.000 litros de combustible al mar. La operación se complicó por las 1.500 toneladas de cartón que se alojaban en la bodega, lugar donde comenzó a propagarse el fuego. Según recuerdan los testigos del suceso, el olor a cartón quemado alcanzó el Centro comercial El Muelle y el Parque Santa Catalina. Se trata del último incendio que se ha producido en las instalaciones del Puerto de La Luz.
El fuego comenzó en el interior del buque el 13 de agosto del año pasado. Las llamas se propagaron rápido por la nave y levantaron una columna de humo que se divisó por toda la bahía capitalina. No obstante, la tonelada y media de cartón complicó la situación. Para extinguir el fuego los bomberos emplearon durante varias jornadas miles de litros de espumógeno desde el barco Miguel de Cervantes, de Salvamento Marítimo. Los agentes vivieron un auténtico infierno aquellos días, pues se superaron los 200º centígrados en el interior del pesquero.
Según reflejó entonces el jefe de Bomberos de la capital grancanaria, José Antonio Nóbrega, el origen del incendio se relacionó con una serie de operaciones de soldadura en caliente en una bodega repleta de material inflamable, concretamente cartón. No obstante, la Autoridad Portuaria argumentó en todo momento que los trabajos en el interior del buque tenían los permisos correspondientes.
De una manera u otra, el caso del Fin Whale tiene un origen común con otros incendios en el Puerto en los últimos años. El 26 de octubre de 2015 las llamas devoraron el interior del Admiral Shabalin. En este caso, el fuego se originó también en la bodega del barco, donde se almacenaban palés de madera y cartón, un suceso calcado al del verano pasado. Además, ambos pesqueros son de bandera rusa. Eso sí, a diferencia del último incendio en La Luz, las llamaradas pudieron ser sofocadas en menos de 24 horas.
También ostentaba la nacionalidad rusa el Oleg Naydenov, un pesquero de grandes dimensiones que comenzó a arder en el Muelle Reina Sofía el 11 de abril de 2015. Ante la amenaza de explosión, el protocolo de emergencias del Puerto obligó a trasladar el buque fuera de la bahía capitalina y alejarlo de la costa. Días más tarde, el barco terminó por hundirse a unos 24 kilómetros al sur de Maspalomas. Las 1.409 toneladas de fuel que llevaba en su interior activaron todas las alarmas por el alto riesgo de contaminación en las costas del Archipiélago.
Precisamente, las aguas al sur de Gran Canaria también fueron protagonistas de una posible tragedia medioambiental en agosto del pasado año. Las bodegas del buque británico Cheshire, con 40.000 toneladas de fertilizantes, ardieron a poco más de 100 kilómetros al sur de Maspalomas. La embarcación estuvo a la deriva durante varias jornadas y amenazó con provocar explosiones, además de lanzar a la atmósfera humo altamente tóxico. En varias ocasiones las autoridades se plantearon trasladar el barco al Puerto de La Luz para terminar de sofocar el problema, algo que nunca ocurrió.
Cabe resaltar que la plataforma Sedco Express ha sido la única embarcación sin bandera rusa que se ha incendiado en La Luz entre 2015 y 2017, en este caso era de Liberia. El fuego se originó en la zona de oficinas cuando la estructura petrolífera estaba atracada en el dique Reina Sofía. Los bomberos apagaron rápido el fuego, después de calcinar gran cantidad de papeles de archivo.
