Sira María Q. N. extorsionó a sus suegros al mes siguiente de matar a su pareja y arrojarlo a la bahía de El Confital dentro de un bidón, según se desprende del escrito de acusación formulado por la Fiscalía de Las Palmas.

El ministerio público solicita para la mujer 15 años de cárcel por homicidio, otros cuatros años de prisión por dos estafas y una multa de 900 euros por apropiación indebida. Los dos delitos de estafa están relacionados con los dos engaños que motivaron el crimen de Sira María, recoge la fiscal Cristina Coterón en sus conclusiones provisionales.

La pareja inició la relación en noviembre de 2014 y se fueron a vivir juntos a Telde en octubre de 2015. Antes convivieron nueve meses en la casa de su suegra, desde enero hasta octubre de ese mismo año, pero Sira María "ocultó" a su pareja y los padres de éste "información relevante de su vida", pues hizo pasar como su sobrino a un hijo mayor de otra relación, entre otras mentiras sobre su familia y su trayectoria profesional.

Estos engaños, según la fiscal, se intensifican al "percibir" la acusada que su novio tiene la intención de "dejarla". La investigada, para revertir esa situación, aprovecha "sus ansias de ser padre" y se "inventa" que está embarazada de dos niños. Ambos comparten la noticia con familiares y amigos.

El embuste funciona porque Daniel abandona la idea de romper la relación al querer estar con sus hijos. Sira María, en ese contexto, lleva la situación hasta sus últimas consecuencias: no sólo acude a las consultas del médico mientras le pide a su pareja que espere fuera, sino que anuncia a todos el parto para el 28 de febrero de 2016, sostiene la fiscal.

A principios de ese mes, la acusada vende el coche de Daniel sin su consentimiento, tras falsear la documentación, y éste denuncia la sustracción del vehículo ante la Policía Nacional. Este fraude y la cercanía de la fecha del parto motivaron el crimen, pues era "consciente" de que la podían descubrir y "decide acabar con la vida de Daniel" en lugar de afrontar sus acciones, sostiene la fiscal.

Entre el 26 de febrero y el 4 de marzo de 2016, la acusada mata a su pareja en la vivienda de Telde. Luego compra el recipiente en el que dos meses después traslada el cuerpo a La Isleta: primero a casa de una amiga y después a la de su padre, hasta que el 12 de mayo tira el bidón por las escaleras de Los Nidillos, en la bahía capitalina de El Confital y, a la mañana siguiente, un vecino encuentra el cadáver en la marea, tal y como publicó LA PROVINCIA en su edición de ayer.

Sira María, tras deshacerse del cadáver con la ayuda de su amiga Vicenta, que irá a juicio por encubrimiento, "hizo creer a los padres y amigos de Daniel" que había dado a luz a los gemelos el 28 de febrero. Es más, según la fiscal, les dice que los dos niños nacieron prematuros y están en un hospital especializado de Madrid para tratarles problemas cardiacos.

Durante los meses de marzo, abril y mayo, la acusada "se hace pasar por Daniel" en el chat familiar del WhatApp y les envía "periódicamente" fotos de bebes entubados que ha cogido de Internet. Luego les pide dinero para costearse los gastos de estancia en Madrid, un engaño "cruel" que causa mucho dolor y angustia a la madre y la tía del muerto: ambas creen que hablan a diario con Daniel e ingresan 415 euros en dos cuentas corrientes a las que tiene acceso su pareja.

Los movimientos bancarios y los mensajes de móvil precipitaron la detención en Asturias de Sira María, que era seguida para frustrar su huida por varios agentes adscritos a la unidad judicial de la Guardia Civil en la Comandancia de Las Palmas, todo ello bajo supervisión del Juzgado de Instrucción número 2 de Telde.