Enrique Fernández, un aficionado al popular juguete de los años 70 Exin Castillos y ex trabajador de Renfe, es el creador de la imaginaria ciudad medieval levantada en el interior del centro comercial las Arenas, y que puede ser visitada hasta el próximo 30 de septiembre. La imaginaria urbe, de nombre Bergantia, está construida con cientos de piezas encajadas una a una.
La ciudad, que comenzó a levantar Enrique en la azotea de su casa, en el barrio de Las Coloradas como parte de un proyecto personal con fines didácticos, cautiva ya a niños y grandes, que desde el pasado domingo visitan el gigantesco puzzle.
La iniciativa, de la que se hizo eco este periódico en el mes de marzo, cautivó a los responsables del centro comercial, que dieron el visto bueno para que se expusiera en el interior de sus instalaciones de Guanarteme.
La imaginaria ciudad cuenta con un monasterio, una plaza mayor, un acueducto, un palacio feudal, un puerto fluvial, un grupo de viviendas, así como un puente de acceso a la misma ya que la urbe se encuentra amurallada. Todo ello se ha diseñado teniendo en cuenta cómo se construían estos edificios en la Edad Media, para lo cual Enrique Hernández se ha documentado con libros de Historia y de Arte.
Para levantar el complejo en el centro comercial, Enrique ha necesitado toda una noche y la ayuda de otra persona. "Se ha creado como un puzzle, se ha transportado las construcciones en cajas y se ha ido luego encajando el rompecabezas en función del espacio con el que contábamos", explica este aficionado a los juegos de construcción de pequeñas piezas, cuya ilusión sería mostrar su ciudad medieval en un espacio museístico o cultural para que los escolares pudieran ver a pequeña escala como era una urbe de dicha época.
Proyecto más grande
A pesar de le envergadura de la instalación, que actualmente tiene 13 metros de largo por 8 de ancho, la ciudad ideada por Enrique aún no está acabada. Su creador confiesa que lo expuesto en el centro comercial es solo una muestra de lo que él tiene en el interior de su cabeza. "No cabría toda la ciudad en las instalaciones de Las Arenas tal y como yo la concibo. Se trata de un gran proyecto".
Enrique señala que la ciudad que él idea se puede adaptar, sin embargo, a cualquier superficie para su exposición. En este caso, por ejemplo, ha habido que hacer modificaciones en el puente, y se han acortado el número piezas que se habían planificado en un primer momento para que tuviera sentido y armonía.
El artista de esta peculiar obra de juguete diseña ahora figuras y detalles para la ciudad para comprender aún más la forma de vida de este conjunto arquitectónico amurallado, compuesto por miles de pequeñas piezas de color arenisca emulando a la piedra.
Su inventor comenzó el proyecto en el mes de febrero con las piezas del Exin Castillo que ha ido coleccionando, ya que es un gran aficionado a este juego infantil, fabricado por Exclusivas Industriales (Exin) en el año 1968, además de haber construido varias instalaciones en espacios comerciales.
El juego, con el que los niños podían levantaban castillos, torres y fortificaciones para jugar y que apenas contenía figuras humanas, dejó de salir al mercado en 2005, aunque se estudia su vuelta según anunció Enrique. Numerosos aficionados intercambian y venden aún hoy piezas a través de las redes sociales del popular juguete.
