El área de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, ha completado la rehabilitación de más de 700 viviendas pertenecientes al Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) de Escaleritas.

El concejal Javier Doreste, que ha supervisado hoy el resultado de los trabajos, ha señalado que "el desbloqueo por parte del Gobierno municipal de la tercera fase del plan, que estaba paralizada, ha supuesto la reforma de las fachadas, azoteas y espacios públicos de 540 viviendas públicas y 12 locales del barrio de Escaleritas".

El Consistorio desbloqueó el proyecto, que quedó paralizado en sus dos últimas fases en el mandato anterior. El área de Urbanismo ha rehabilitado en los dos últimos años un total de 540 hogares, 220 viviendas pertenecientes a la segunda fase y 320 viviendas de la tercera fase, completando así las 708 casas y los 12 locales comerciales.

Los bloques de viviendas, zonas comunes y patios de Escaleritas que han sido rehabilitados, y que están situados junto a la Plaza Obispo Frías, forman parte del Convenio del Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) de Escaleritas, con una inversión de 1.767.990 euros de fondos propios, del Estado y del Gobierno regional.

Doreste ha recordado que "una de las grandes apuestas del área de Urbanismo desde la llegada al grupo de Gobierno ha sido impulsar la rehabilitación de la vivienda pública en los barrios populares de la ciudad. Prueba de ello es el avance que han experimentado proyectos de rehabilitación como el de Tamaraceite, con la construcción de 179 nuevas viviendas, y este de Escaleritas, que hemos desbloqueado, ya que la tercera fase estaba paralizada, y que mejorará notablemente las condiciones de habitabilidad de más de 700 familias".

La transformación que han experimentado muchos de estos bloques, que se construyeron en 1957, tras esta intervención, ha permitido devolver al uso público y de todos los vecinos los patios que en muchas ocasiones habían sido ocupados por construcciones ilegales.

Esta actuación en el ARRU de Escaleritas ha sido posible gracias al convenio firmado en 2015 por el Gobierno municipal y la administración autonómica para desbloquear un proyecto que arrastraba cinco años de parálisis debido a la falta de iniciativa en el mandato anterior.

Ese impulso al ARRU permitió invertir en 2016 una cantidad de 936.000 euros procedentes de ese convenio (en el que el Ayuntamiento aporta el 42% de los fondos). Con ese dinero comenzó la rehabilitación de todas las zonas comunes de los cinco primeros bloques situados en las inmediaciones del Pabellón Félix Santana Santana (Obispo Frías), posteriormente continuó en 2017 la rehabilitación de dos nuevos bloques situados en la calle Tomás García Guerra.

Esta actuación en las viviendas de los patios de Escaleritas ha permitido la mejora de 6.000 metros cuadrados de espacios libres públicos entre bloques, los portales de acceso, las azoteas, el arreglo de las instalaciones generales de agua y saneamiento, las fachadas, así como la demolición de los espacios traseros de los edificios, donde se encuentran los patios, para su posterior adecuación y ajardinamiento.

El objetivo del proyecto es mejorar las condiciones de habitabilidad de los vecinos, compensar la escasez de superficie útil de las viviendas ampliando o mejorando la superficie de las zonas comunes, así como conseguir que los residentes se sientan más identificados con sus hogares y el entorno.

La actuación inicial que comenzó hace siete años, consistió en la ocupación de los patios situados entre los edificios. La primera fase del proyecto se puso en marcha en 2008, la segunda no se completó y la tercera y última quedó paralizada en 2011. El Plan comprendía 16 edificios de las antiguas casas municipales construidas en 1957 entre las calles Doctor García Guerra, Benítez Inglott, Obispo Romo y el parque Hermanos Millares.