"Igual que abro el rellano de mi casa y no me encuentro un bar de la noche a la mañana, ni a gente echando copas en el zaguán de mi casa porque no puede, tampoco se podrá instalar una vivienda vacacional sin cumplir con la normativa si está declarada como tal". Así lo indicó ayer el alcalde de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, durante su respuesta a cómo afectarán las medidas que ha tomado el Tripartito respecto a la instalación de una vivienda para alquiler vacacional en una comunidad de vecinos y que tantos problemas está generando en las zonas residenciales, a las personas que viven de alquiler y al propio sector hotelero.
Hidalgo puso como ejemplo su propia comunidad de vecinos para aclarar a los representantes de diversos sectores de la sociedad canaria que acudieron al desayuno ofrecido por LA PROVINCIA, en colaboración con Poema del Mar y hoteles The, que lo único que ha hecho el Ayuntamiento al respecto es incluir normas superiores, que ya estaban en uso a nivel general "desde hace 18 años", al planeamiento urbanístico de la ciudad.
El alcalde subrayó que no es intención de este Ayuntamiento cargarse este sector, como se ha dicho en los mentideros públicos, sino que cumplan con la normativa como cualquier otra actividad pese a que no tiene competencia en la materia [el Gobierno autonómico se lo concedió a los cabildos], ni recursos para su control. Además dijo que, gracias a este tipo de negocios, se pueden albergar a los numerosos turistas que llegan a la ciudad puesto que no hay camas suficientes en los alojamientos tradicionales. Y para ello dio algunos datos sobre el sector usando como fuente al Cabildo de Gran Canaria: 1.300 viviendas registradas y 5.000 camas.
El alcalde puntualizó además que las viviendas vacacionales estaban ayudando a mejorar la segunda línea de la playa de Las Canteras pero obvio mencionar las consecuencias que ha tenido este tipo de negocio para los residentes que viven de alquiler, que se les ha echado de la zona, y del incremento de los precios de alquiler.
La Base, a Santa Cruz
Fue una de las anécdotas del encuentro del máximo responsable de la ciudad, que también tuvo que hacer frente a la afirmación de algún asistente que, por boca del director de LA PROVINCIA, Antonio Cacereño, le cuestionó que la recuperación de la Base Naval y de La Isleta para la ciudad parecía una preocupación más de otros miembros del Tripartito que del PSOE.
Hidalgo afirmó que, en este asunto, "todo se hace de manera coordinada; se lo puedo garantizar" y que ya se hizo la demanda a Defensa a través del representante de Nueva Canarias y que se creó una comisión al respecto. Y explicó que la pelota está ahora en Defensa que tiene que analizar el coste que supondría el cambio de ubicación y dónde se instalaría. "Nadie quiere una Base Naval; es como las cárceles o los vertederos, nadie quiere uno al lado de su casa", espetó, mientras relató las alternativas que se están planteando en caso de una negativa del Ejército. Fue cuando Antonio Cacereño, de broma, le sugirió que por qué no proponían ubicar la Base Naval en Santa Cruz de Tenerife mientras encontraban sitio en Gran Canaria; lo que provocó las risas de los asistentes. Hidalgo, siguió la broma, y señaló la ubicación de la refinería como el sitio ideal.
El alcalde estuvo acompañado por sus compañeros de partido en el Ayuntamiento: la concejala de Fomento, Inmaculada Medina; el concejal de Deportes, Aridany Romero; la edil de Cultura, Encarna Galván; la concejal de Educación, Lourdes Armas; el concejal de Alumbrado Público y Aguas, Roberto Santana; y concejal de Recursos Humanos, Mario Regidor además de la asesora de Seguridad, Eulalia Guerra.
También por colegas de partido como el vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria, Ángel Víctor Torres; la exconsejera del Gobierno de Canarias, Isabel Mena; el consejero de Transportes, Francisco Trujillo, y el secretario de la Política de Refugiados, Luc André, y el secretario general del PSOE en Las Palmas de Gran Canaria, Miguel Ángel Pérez. Y sus familiares más cercanos: su mujer y su suegra.
No acudió, sin embargo, ningún compañero de Tripartito. Y mucho menos representantes de la oposición en el Consistorio.
En menos de 30 minutos, el alcalde de la ciudad desgranó un discurso que partió de una anécdota con Patricia Vega, vecina de Las Rehoyas, y terminó con una cita del escritor francés Víctor Hugo para explicar la ciudad que su gobierno municipal está construyendo.
A la mujer la puso como ejemplo de lo que está realizando el gobierno municipal para acabar con la desigualdad social, "la primera trinchera" en la que lucha el Tripartito según Hidalgo, y que, en los tiempos que corren, no es otra que romper con la brecha digital en una sociedad cada vez más enlazada a través de la tecnología. En este caso, hizo referencia a uno de los proyectos de Enrehoyate - 'Comunicación Divino Tesoro'- que trata de enseñar a los mayores de 60 años a cómo comunicarse a través de las redes sociales y los móviles. Mientras que el autor de Los Miserables o Nuestra Señora de París salió a relucir en su discurso para indicar la dirección que lleva el Tripartito en cuanto a modernizar la ciudad y solventar los principales retos de una urbe del siglo XXI. "Estamos convencidos y seguimos igual de ilusionados que el primer día de trabajo, porque creemos que, como decía Víctor Hugo: Ningún ejército puede parar una idea cuyo tiempo ha llegado".
