Primero de Mayo reabrió ayer al tráfico después de diez meses de obras. La calle retoma su actividad con algunos cambios significativos como el nuevo carril bici que conectará con el Paseo de Chil o la posibilidad de que los vehículos privados puedan circular entre el tramo que va desde San Bernardo hasta Bravo Murillo, a diferencia de como venía siendo hasta ahora. Con ello, la vía perderá una decena de plazas de aparcamiento, si bien se han creado otras 23 en la nueva zona azul que sustituye a la parada de guaguas de la Alameda de Colón, según explicó el concejal de Movilidad, José Eduardo Ramírez.

El cierre de Primero de Mayo tuvo lugar a principios de este año para poder abordar los trabajos de la segunda fase de rehabilitación del parquin de San Bernardo. El enclave, clausurado desde abril de 2015 por el mal estado de sus instalaciones, requería además de las acciones en su interior de una intervención exterior que implicaba la demolición y levantado de pavimentos, excavaciones, mejoras en la red de saneamiento y drenaje, impermeabilizaciones y rellenos con grava. De ahí que tuviese que cerrarse temporalmente la calle cuya apertura estaba prevista, inicialmente, para el próximo 4 de diciembre para no dañar a los comerciantes de la zona de cara a las ventas de las Navidades.

"Por eso estamos de enhorabuena, porque no todos los días ocurre que se finalice una obra con dos semanas de antelación a la fecha prevista", señaló Pedro Quevedo, responsable del área de Promoción Económica, Empleo y Turismo, quien también quiso resaltar la mejora importante para la ciudad desde el punto de vista de la movilidad que supone la finalización de esta obra. Y es que con la apertura definitiva de la vía se incluye el primer tramo de la nueva red de carriles bici que servirá de avanzadilla al resto de intervenciones que ya han comenzado en otros puntos como Reyes Católicos o León y Castillo. Este ramal, concretamente, enlazará desde la calle Maninidra y conectará con el Paseo de Chill.

También han quedado abiertos los accesos peatonales desde Primero de Mayo hacia San Bernardo. Y a partir de ahora los vehículos privados también podrán circular desde el tramo que va desde esta última calle hasta Bravo Murillo, un trayecto reservado hasta antes de la obra al transporte público. Esto evitará "la vuelta que tenían que dar los coches a los que se les obligaba a bajar por San Bernardo y continuar por Viera y Clavijo para llegar a Bravo Murillo", apostilló Ramírez.

Otro de las transformaciones visibles es el traslado al lado de la acera del carril bus que antes discurría por el centro. Asimismo, entre los cambios también se encuentra la desaparición de una decena de aparcamientos en Primero de Mayo. Una medida que se verá compensada con la nueva zona azul con 23 nuevas plazas de estacionamiento regulado que se han creado en la Alameda de Colón, justo donde estaba la parada de guaguas. Para ello la parada de las líneas 19 y 21 será desplazadas de manera definitiva a la de Primero de Mayo. En lo que a la posibilidad de aparcar se refiere, el concejal de Movilidad también recordó la existencia del aparcamiento de la Subida de Mata. Uno de "los más baratos de la ciudad" al contar con una tarifa por las tardes fijada en 0,50 euros la hora.

Desde hoy también se recuperará el trayecto normal de Guaguas Municipales, por lo que se dejarán fuera de servicio las terminales provisionales que durante este tiempo han operado en la calle Francisco Gourié. De este modo, retomarán la circulación por la Avenida Primero de Mayo líneas 2 (Guiniguada-Puerto por Tomás Morales), 25 (Auditorio-Campus Universitario), 32 (Guiniguada-Auditorio, por San Antonio) y 33 (Guiniguada-Puerto, por Ciudad Alta) que retornarán a sus paradas en el Guiniguada.