El área de Cohesión Social, Igualdad y Juventud del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria se sumó este sábado a a una iniciativa promovida por Amnistía Internacional, y conocida como 'Ciudades por la vida', que consiste en la realización de una serie de actividades de tipo simbólico como muestra de rechazo a la pena de muerte. Más de 200 jóvenes de Secundaria, entre 14 y 18 años, y alumnado perteneciente a la Red de Escuelas por los Derechos Humanos participaron en la plaza de Santa Ana en diversas actividades. Posteriormente, se procedió a la lectura de un manifiesto y se iluminó la fachada de las Casas Consistoriales de color amarillo, en señal de rechazo a la pena de muerte. El concejal Jacinto Ortega, que presidió el encendido, recordó "la importancia que tiene este simbólico acto porque significa tomar conciencia de un grave problema que sigue estando vigente en 58 países de todo el mundo".