Las obras debajo de casa son siempre molestas y más si se hacen de madrugada. De ahí que los vecinos de la calle Isla de Cuba denunciaran ayer la interrupción de su descanso durante la noche del domingo al lunes en la que se ejecutó el asfaltado del tramo de la vía que llega hasta el colegio Santa Catalina.

Concretamente, la intervención se llevó a cabo desde las seis de la tarde hasta las cuatro de la mañana, por lo que los residente de la zona vieron alteradas sus horas de sueño. Estaban avisados sobre ello, ya que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria colocó varios carteles informativos la pasada semana. No obstante, desde la Asociación de Vecinos Betancores- Joaquín Costa- Farray siguen sin entender por qué no se ha elegido otra franja horaria para ejecutar esta intervención "en una vía estrecha donde además no hay tráfico". Es por eso que ayer decidieron realizar un escrito con una queja formal que van a presentar por sede electrónica.

Desde el Consistorio, por su parte, han aclarado que las autorizaciones para el cierre de calles por obras solo se dan por la noche para evitar trastornos en el tráfico de la ciudad por lo que del mismo modo se procedió anoche en Presidente Alvear.