Algunas limpiadoras de los colegios públicos se han visto obligadas este mes a recurrir a los comedores sociales para poder comer, debido al retraso en el pago de la nómina de diciembre, por parte de la empresa Ralons Servicios, adjudicataria del servicio, según denunció José Luis Sosa Naranjo, representante UGT. “Estamos a 21 de enero y seguimos sin cobrar”, se quejó. La demora en el pago afecta también a las limpiadoras de la ULPGC, que este lunes volvieron a salir a la calle a protestar para reclamar sus sueldos.

Sosa Naranjo criticó el reiterado incumplimiento en los pagos de las nóminas, que deben estar ingresadas antes del cinco de cada mes, y volvió a reclamar que se le retire el servicio a la empresa de Miguel Ángel Ramírez, porque las demoras de los salarios están provocando grandes dificultades para salir adelante a la plantilla que limpia los colegios públicos, en su inmensa mayoría mujeres.

Por su parte, la edil de Educación, Lourdes Armas, consideró que no hay ninguna justificación para los retrasos en las nóminas de las limpiadoras de los colegios, porque el Ayuntamiento paga “en tiempo y forma. Estamos pagando cada 33 días, mucho antes de los 60 días” que establece la Ley de Contratos como plazo máximo para abonar el dinero a las contratas. “Una empresa que se presenta a un concurso de este nivel tiene que tener la solvencia suficiente para pagar a sus trabajadores”, indicó.

Añadió que el Ayuntamiento no puede sancionar a la empresa, pese a los reiterados retrasos, porque la Ley de Contratos establece que tiene que haber un retraso de más de dos meses en el pago para que las administraciones puedan incoar un expediente sancionador. Armas explicó que a lo largo de las próximas semanas se volverá a sacar a concurso el servicio.

Igual de apurada es la situación de las trabajadoras que limpian las instalaciones de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, que este lunes se volvieron a concentrar en el parquin del Rectorado. Además de la nómina del mes de diciembre, la empresa aún no les ha abonado la paga extra de julio. Las trabajadoras aseguran que están pasando verdaderas calamidades por los reiterados incumplimientos.

Queremos cobrar lo que ya hemos trabajado. Nos han dicho que la Universidad no ha pagado, nosotros no sabemos si es verdad o no. Cuando nos den lo que es nuestro nos iremos a casa a descansar”, gritaban las trabajadoras durante la concentración. César Merino representante de Intersindical Canaria, exigió, a través de Twitter, la “resolución inmediata” del contrato de la Universidad con la empresa Ralons y pidió a los representantes de la institución que no se produzcan “más engaños”.

Desde la empresa Ralons indicaron que se está haciendo “todo lo posible” para abonar la nómina de diciembre en “estos días”.