El traslado de la Base Naval continúa en punto muerto. Como ha ocurrido con gobiernos anteriores, la ministra de Defensa, Margarita Robles, volvió a condicionar este martes la devolución a la ciudad de la zona del Arsenal a la búsqueda de otro sitio alternativo en Gran Canaria donde reubicar a los militares. La responsable de Defensa, que visitó la Base Naval, la Base General Alemán Ramírez de Las Coloradas y las antiguas dependencias del regimiento Canarias 50, se limitó a afirmar que hay buena disposición por parte de su departamento y que ya se han iniciado negociaciones entre el Arsenal y el Ayuntamiento de la capital grancanaria en relación con el traslado y también respecto al retranqueo de la fachada del edificio que ha pedido la ciudad para conectar el parque marítimo con la playa de Las Alcaravaneras, mientras se logra sacar la Base Naval de esta zona estratégica de la capital grancanaria.

"Lo único que puedo decir", sostuvo, "es que hay una disposición máxima por parte del Ministerio de Defensa a llegar a acuerdos y convenios que protejan los intereses de la Armada y también los intereses de la ciudadanía". Al respecto, indicó que los intereses de la Armada "son los intereses de todos los españoles -porque el Ejército trabaja para todos los españoles- y al mismo tiempo compaginarlos" con las aspiraciones de la ciudadanía de Las Palmas de Gran Canaria, que quiere recuperar esa zona militar, que fue ocupada por los militares en 1940.

Margarita Robles ni siquiera aclaró si el Ministerio de Defensa estaría dispuesto a financiar la reubicación del Arsenal, cuya valoración inicial fue cifrada en 400 millones de euros hace varios años.

"Es lógico", consideró, "que el Ministerio de Defensa tenga una obligación legal de velar por lo que son sus propiedades, pero tenemos la plena disponibilidad de negociar con las instituciones aquí en Las Palmas, porque si hay otro lugar de ubicación para la Armada, nosotros estamos encantados de llegar a cualquier tipo de acuerdo. La prueba", añadió, "es que ya está habiendo negociaciones entre la Armada y la Alcaldía, ha habido varias reuniones y estamos trabajando en la posibilidad de encontrar espacios alternativos o dar respuestas alternativas ".

La ministra eludió hablar de posibles emplazamientos alternativos para la Base Naval, porque "eso depende de las negociaciones sobre la ubicación" y también de la calificación de "espacios que son de dominio público".

Retranqueo

Retranqueo"Estamos en ello", sostuvo la titular de Defensa cuando se le preguntó si el Ministerio aceptará retranquear la fachada que ha pedido el Ayuntamiento, mientras se produce el traslado en un futuro que por ahora no parece muy cercano. Robles indicó al respecto que el retranqueo es una de las cuestiones que "están siendo objeto de negociación" en estos momentos.

El traslado de la Base Naval es una reivindicación histórica de la ciudad, que fue reactivada en diciembre del pasado año, al aprobar la Comisión de Defensa volver a poner en marcha el grupo de trabajo para impulsar su recuperación. La responsable del Ministerio de Defensa pidió que no se instrumentalice el traslado del Arsenal para el "pim pam pum" y el debate partidista.

"Todas estas cuestiones", consideró, "se tienen que hacer al margen del debate político. Rechazo plenamente que se puedan utilizar en ningún caso las Fuerzas Armadas o sus instalaciones como instrumento de política partidista, y mucho menos en época de campaña preelectoral. Las Fuerzas Armadas y lo que representan son patrimonio de todos los españoles por encima de ideologías o de partidos políticos".

En otro orden de cosas, tampoco aclaró nada la titular de Defensa sobre cuando se hará efectiva la cesión del antiguo acuartelamiento del regimiento Canarias 50, situado en la Isleta, de cuya recuperación para la ciudad se viene hablando como un hecho cercano desde hace más de diez años.

El gobierno municipal que preside Augusto Hidalgo contempla la cesión de estos terrenos como el objetivo más factible a corto plazo, entre las cuestiones que se están negociando con el Ministerio de Defensa, relacionadas con la recuperación de antiguas zonas militares. El objetivo del Ayuntamiento es hacer un gran parque y otros equipamientos en los 40.000 metros cuadrados que ocupa. La ministra realizó ayer una visita fugaz al antiguo acuartelamiento donde visitó una exposición de vehículos, pero al ser preguntada una hora más tarde sobre la fecha de la cesión de los terrenos, manifestó que "hay que ir viendo las cosas con calma".

Tampoco dijo nada la ministra -no fue posible preguntar nada sobre el asunto en la rápida rueda de prensa que ofreció en lo alto de una de las montañas de la zona militar- sobre cuando se producirá la cesión de los terrenos de SanFrancisco situados al lado del Hospital Militar

, por los que espera el Ayuntamiento para desviar la carretera y proseguir con las obras del mirador de la Punta de Diamante.

Valor geoestratégico

Valor geoestratégicoLa responsable de Defensa planteó la importancia de "poner en valor laimportancia de Canarias desde el punto de vista geoestratégico".

"Para nosotros", resaltó, "es fundamental Gran Canaria y las Islas Canarias, porque son una parte fundamental de España desde la perspectiva geoestratégica". A su juicio, el Archipiélago es "un punto de referencia esencial para la Unión Europea y el que esté aquí el Ejército de Tierra, lo que aporta es seguridad, tranquilidad, la defensa de la paz y de la libertad de España y el mundo y, sobre todo, a mí me gusta poner siempre en valor la preparación, dedicación que tienen". Robles mostró su agradecimiento y reconocimiento al "esfuerzo que hace el Ejército de Tierra en Gran Canaria y en toda España".

Pateando La Isleta

La ministra Margarita Robles tuvo la oportunidad ayer de disfrutar de las magníficas vistas de las montañas de La Isleta, una zona que está vedada a la mayoría de los ciudadanos de la capital grancanaria y que podrá ser visitada, a través de rutas guiadas, gracias al convenio, a cuya firma asistió. La visita de la ministra a los acuartelamientos militares de la capital grancanaria duró más de cuatro horas. La gira comenzó a primeras horas de la mañana en la Base General Alemán Ramírez, donde tienen su sede unos 2.000 militares y soldados. Pasó revista a las tropas, subió a una de las montañas - por el camino contempló una serie de maniobras- con vistas a la antiguo prisión militar. Bajó después a la antigua sede del Canarias 50, cerrada desde hace años, y se dirigió por último a la Base Naval, donde volvió a pasar revista a las tropas y visitó el Rayo, el patrullero de la Armada, a punto de partir hacia el Mediterráneo.