El Cabildo ha instalado sendos miradores en Las Coloradas y El Confital para que, con un mínimo impacto paisajístico, los visitantes pueden disfrutar de las impresionantes vistas panorámicas de la emblemática península de La Isleta y del litoral norte de Gran Canaria, según una nota de la Corporación.
Los miradores son infraestructuras de uso público “ligeras y fácilmente reversibles con un panel que informa de algunos de los valores biofísicos y culturales observables desde el mirador”, indicó el consejero de Medio Ambiente, Miguel Ángel Rodríguez, quien agradeció a la Comunidad de Bienes Isleta Alta la autorización para instalar las estructuras.
El nuevo mirador de Las Coloradas, cercano al campo de fútbol, tiene una superficie de 33 metros cuadrados, mientras que el nuevo mirador de la Montaña de La Cruz en El Confital cuenta con una superficie de 4,6 metros cuadrados. En este segundo mirador el Cabildo dispuso un módulo de plataforma de traviesas de madera, adaptado a la topografía de la cúspide de la montaña, sin modificar los perfiles que ya había en el terreno y con sumo cuidado para evitar el impacto visual.
La propuesta de elementos elegidos por la Consejería de Medio Ambiente para la ejecución de los miradores es totalmente reversible, es decir, se han utilizado materiales blandos y de muy bajo impacto ambiental y paisajístico. Para la construcción de la superficie se utilizaron traviesas de madera ecológica pirograbadas unidas en su base, que van formando plataformas y que se colocan adaptándose a la topografía del lugar.
La obra, que ha sido financiada con fondos del Fdcan tuvo un presupuesto de 32.000 euros y un plazo de ejecución de tres meses. Dentro de este proyecto, el Cabildo realizó también una actuación de mantenimiento de La Cruz de El Confital con la retirada de tres mesas con asientos de hormigón armado muy deterioradas por el paso del tiempo y la falta de mantenimiento. Asimismo, retiró un talud de Las Coloradas que se había convertido en escombrera, fueron sacadas nada menos 318 toneladas de escombros.
En la vertiente oeste del campo de futbol de Las Coloradas también se hizo un importante trabajo de limpieza con expertos en trabajos verticales para retirar gran cantidad de escombros, residuos urbanos como sillas de plástico, zapatos usados, fragmentos de tejas y material cerámico que alteraban negativamente las condiciones naturales de la zona. Con esta actuación el Cabildo retiró seis toneladas y media de residuos, un trabajo limpieza que contó con una inversión de 8.204 euros.
