Se avecina otro pacto tripartito en la capital grancanaria. Los socialistas de Augusto Hidalgo han salido reforzados al reafirmar su hegemonía en la ciudad tras cuatro años de mandato, pero aunque ganan cuatro concejales y llegan a un total de 11, no logran los 15 necesarios para la mayoría absoluta, por lo que tendrán que pactar para poder gobernar. Y lo más probable es que se vuelva a alcanzar un acuerdo con sus socios actuales del Tripartito: Javier Doreste, de Unidas Podemos, que pierde tres ediles y se queda con otros tres, y Pedro Quevedo, de Nueva Canarias, que gana otro concejal y pasa de dos a tres. Entre el PSOE de Hidalgo y las formaciones de Javier Doreste y Pedro Quevedo aglutinan 17 concejales, dos más que los que hay en el mandato que está a punto de concluir.

En los resultados destaca el desplome de Podemos, que, como anunciaban los sondeos, pierde la mitad de sus concejales. Y es que, como ocurrió a nivel nacional, el PSOE crece a costa de la coalición formada por Podemos-Izquierda Unida-Equo, aunque también es verdad que consigue más votos que los que se ha dejado por el camino la agrupación de Doreste, que anoche reconoció que "no son buenos resultados". "Ha supuesto una decepción", admitió.

Y es que Unidas Podemos es la segunda fuerza que más votos pierde -la primera es el PP-, al registrar 11.374 sufragios menos. La formación sigue siendo la tercera fuerza y obtiene 15.869 votos (10,38%), frente a los 27.243 que obtuvo en 2015.

Los de Pedro Quevedo han salido, por el contrario, reforzados, al ganar un concejal más, pese a las críticas de vecinos y de la oposición contra la MetroGuagua y los carriles bici, aunque también es verdad que la última concentración convocada, a tres días de las elecciones, no concitó mayor respaldo ciudadano.

Quevedo calificó de "espléndidos" los resultados, pese a la "campaña que ha sufrido Nueva Canarias". Consideró que el trabajo realizado durante el mandato merecía que su partido hubiera obtenido hasta "cinco concejales", algo que al final no ha podido ser por la "ola del PSOE".

Además del desplome de Unidas Podemos, destaca el nuevo batacazo del Partido Popular, que, en la línea de lo ocurrido a nivel nacional, se continúa desangrando y perdiendo votos. La agrupación que lidera la exalcaldesa Pepa Luzardo pierde otros tres concejales y se queda con siete.

Ola ganadora

El triunfo del PSOE se vio venir desde los primeros momentos del escrutinio. A las 21.49 horas, con el 21,91% de los votos contabilizados, el PSOE de Augusto Hidalgo lideraba los resultados con 11 concejales y también comenzaba a adivinarse desde los primeros minutos la debacle del Partido Popular y también la de Podemos.

El PSOE y Unidos por Gran Canaria se disputaron un concejal durante las últimas dos horas del recuento. Los socialistas estuvieron a 34 votos de lograr el concejal número 12. Pero se quedó con 11. Al filo de la medianoche, con el 94,55% escrutado, continuaba la incógnita en torno a si el PSOE se llevaba o no otro concejal. Esa posibilidad hubiera cambiado el escenario de los pactos, porque con 12 concejales Hidalgo sólo tendría que pactar con un partido, en lugar de con dos. Así lo reconocía el propio Pedro Quevedo, que admitía que "si el PSOE consiguiese 12 concejales, la mayoría absoluta se podría conseguir con dos partidos".

Aún en ese hipotético caso, se mostró partidario de reeditar el Tripartito, al considerar que "la estabilidad del gobierno" de Las Palmas de Gran Canaria "está más afianzada con tres patas que con dos". De hecho, el pacto de Hidalgo, Doreste y Quevedo, se ha caracterizado por la estabilidad y la lealtad entre los socios, a pesar de las diferencias.

Así las cosas, Quevedo se ofreció a revalidar el pacto de progreso. "Ahora", sostuvo, "seremos capaces de demostrar lo que podemos hacer con un poco más de tiempo. Trabajaremos para exigir la condición de ser la mayor ciudad de Canarias, sea cual sea el Gobierno" regional.

La ola nacional de subida ha vuelto a favorecer al PSOE, que gana 15.063 votos más. Cuando se había escrutado el 99,47% de los sufragios, los socialistas habían obtenido un total de 48.375 votos (un 31,75%), frente a los 33.312 y el 19,74%. De esta manera, los socialistas se convierten en la fuerza más votada y desbancan al PP.

Al filo de la medianoche, Hidalgo hizo su entrada triunfal en el Auditorio Alfredo Kraus. "Ya es oficial", sostuvo. "Hemos ganado las elecciones. Estaba convencido desde el minuto uno de que esta ciudad quiere crecer, de que, aunque nos dijeran lo contrario, esta ciudad mira al futuro con esperanza. Yo estaba convencido de que esa mayoría silenciosa quería que esta ciudad despertara. Y esta ciudad hoy ha despertado".

El regidor dio por hecha la reedición del pacto y anunció que "a partir de mañana [por hoy], estaremos puerta a puerta para conformar otro nuevo gobierno de progreso en Las Palmas de Gran Canaria".

La segunda fuerza que más votos gana es Nueva Canarias, que consigue 1.855 votos más, al aglutinar el apoyo de 14.490 votantes (el 9,51% de los votos), lo que le permite convertirse en la cuarta formación del Ayuntamiento capitalino.

Ciudadanos, el partido liderado por Beatriz Correas, consigue una discreta mejora de sus resultados, al conseguir un tercer concejal. La formación de Correas obtiene 14.467 apoyos. Ha logrado 1.448 sufragios más que en 2015, aunque baja un puesto y se convierte en la quinta fuerza, al pasarle por delante NC.

Hay que resaltar el regreso de Nardy Barrios, de Unidos por Gran Canaria. Su pacto con Coalición Canaria no le ha dado gran resultado, pues sólo ha podido mantener los dos ediles que consiguió en 2015 Ángeles Batista en solitario. Ni siquiera ha conseguido igualar los votos de las anteriores elecciones. Barrios consigue 12.761 sufragios, 1.992 menos de los 14.753 votos que obtuvieron en 2015 Unidos por Gran Canaria y Coalición Canaria. La coalición se convierte en la sexta fuerza municipal y se queda en el mismo lugar.