La remodelación de la cubierta del techo plano de la Ermita de Santa Catalina, en el Pueblo Canario, ha generado diferencias entre el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y el Cabildo de la Isla, que han provocado un retraso en las obras de este Bien de Interés Cultural. Ayer, técnicos municipales y de la Comisión insular de Patrimonio Histórico se reunieron con el concejal de Urbanismo capitalino, Javier Doreste, y el consejero de Presidencia -donde está adscrito el departamento de Patrimonio-, Teodoro Sosa, para tratar de desbloquear el proyecto y evitar un pleito entre las dos instituciones.
El Consistorio demandó por la vía contencioso-administrativa al Cabildo "para proteger al Ayuntamiento" antes de que se agotara el plazo de respuesta que tenía por la vía administrativa, explicó Doreste. Según el edil, se sigue "trabajando políticamente para evitar ir a los juzgados", motivo principal de la reunión que mantuvieron ayer. Su concejalía, encargada de gestionar las obras en la ermita, ha elaborado un nuevo proyecto que envió a finales de julio y que ahora analizarán los técnicos insulares durante los próximos 15 días, para luego decidir si las obras pueden o no continuar.
Por su parte, Sosa aseguró que esta demanda "no tiene ningún tipo de gravedad" ya que es algo muy común entre administraciones "para ganar tiempo". "Es un mero trámite, no tiene mayor historia", destacó.
"En el mes de junio se paralizan las obras porque los técnicos de Patrimonio entienden que no se está cumpliendo con el mandato que en su momento realiza la Comisión de Patrimonio Histórico del Cabildo", apuntó el consejero sobre el por qué de la decisión de paralizar las obras.
El concejal de Coalición Canaria-Unidos por Gran Canaria en el Ayuntamiento, David Suárez, alertó ayer de la demanda del Gobierno municipal al Cabildo, a la que tachó de "lamentable" porque demuestra "la evidente falta de entendimiento entre ambas administraciones públicas del mismo color político". Suárez criticó que ya son seis meses de retraso en las obras de la ermita debido a esta situación y que espera que no se demore "mucho más". Por otro lado, recriminó al alcalde Augusto Hidalgo que haga "caso omiso" a la "continua parálisis y retraso de la gestión municipal" en el Pueblo Canario.
