El Ayuntamiento ha impuesto una multa de 3.001 euros a los dueños del local de ocio Las Brujas, situado en Barranco Seco, por los ruidos que provocó hasta altas horas de la madrugada durante una fiesta celebrada a principios de este verano. La Policía Local tuvo que intervenir ante la avalancha de llamadas de vecinos de barrios de la zona y de Ciudad Alta que se quejaron de que el estruendo de la música no les dejaba descansar. La escandalera fue de tal calibre que según asegura la Policía Local, la música de la fiesta se podía oír desde La Paterna.
El servicio de Edificación y Actividades Clasificadas, que depende de la Consejería de Urbanismo, ha reactivado este mes el expediente de infracción abierto contra la empresa Amare 17 Grupo Empresarial S.L., ya que el anterior tuvo que archivarse porque venció el tiempo reglamentario después de la denuncia (tres meses) para dictar una resolución sobre el asunto.
Fuentes de la Consejería de Urbanismo, que dirige Javier Doreste, indicaron que el expediente no se pudo tramitar en los tres meses que prevé la normativa debido a "la falta de personal".
Aclararon que "la infracción no ha prescrito", pese al archivo inicial del expediente abierto en junio pasado, que ha sido reabierto, por lo que el incumplimiento del plazo que establece la normativa para dictar la resolución no invalida la sanción, aseguraron. Las fuentes añadieron que el expediente se incoó en junio, por lo que a la falta de personal se sumaron las vacaciones de julio y agosto, lo que redujo aún más el número de trabajadores del servicio.
La fiesta que causó la escandalera denunciada por los vecinos se produjo, según la resolución, durante la madrugada del pasado 2 de junio. La centralita del Centro Municipal de Seguridad y Emergencias de Las Palmas de Gran Canaria (Cemelpa) comenzó a recibir numerosas llamadas de vecinos quejándose de las molestias ocasionadas por el ruido de la música procedente de Las Brujas.
La Policía Local pudo comprobar que la contaminación acústica alcanzaba varios puntos de la Ciudad Alta, incluso después de las 3:30 horas de la madrugada. La música se oía con total nitidez, aseguraron los guardias, desde La Paterna.
Infracción grave
Los funcionarios que instruyeron el expediente consideran que los dueños del bar Las Brujas han cometido una infracción grave por producir ruidos y molestias, según establece el artículo 63.9 de la Ley 7/2011 de Actividades Clasificadas y Espectáculos Públicos.
Dicha norma considera que las infracciones graves por producir ruidos y molestias pueden ser sancionadas con una multa de 3.001 a 15.000 euros y con la reducción del horario y también con la suspensión temporal de la actividad o de los efectos de la licencia o autorización, hasta un máximo de tres meses. Sin embargo, el servicio ha decidi-do imponer una multa de 3.001 euros, que podrá ser reducida a 2.400 euros (un 20% menos) si el empresario multado no recurre la resolución sancionadora y reconoce de forma expresa su responsabilidad en los hechos imputados.
El expediente de infracción fue iniciado el 27 de junio de 2019 y firmado por la directora general de Edificación y Actividades, Carmen Nieves Martin.
Más de tres meses después, el mismo servicio de Edificación y Actividades Clasificadas emitió una segunda resolución el pasado 9 de octubre en la que se resuelve archivar el expediente sancionador incoado a la empresa Amare 17 Grupo Empre-sarial S.L., "al haber transcurri-do el plazo de tres meses para resolver el procedimiento sin que haya recaído resolución expresa".
Ese mismo día, el 9 de octubre, la directora general de Edificación y Actividades Clasificadas, firmó una nueva resolución en la que se incoa de nuevo el expediente sancionador, contra los dueños del local de ocio de Barranco Seco, que tiene un aforo superior a las 3.000 personas.
