Sítycleta, el sistema de bicicleta pública compartida de Las Palmas de Gran Canaria, sigue con una evolución positiva según reflejan los datos estadísticos que ha presentado hoy Sagulpa, la administradora del servicio, correspondientes al mes de septiembre. De acuerdo a las mismas, ya son más de 33.000 las personas registradas en el servicio. Otro de los datos que confirman esta tendencia ascendente es la cifra de abonos, que creció en un 59% respecto al mismo mes del año anterior, situándose en un total de 4.658 abonados.

"El hecho de que el 85% de los alquileres corresponda a abonados evidencia que, para buena parte de los ciudadanos, la Sítycleta se ha convertido en su medio de transporte habitual", ha explicado José Eduardo Ramírez, concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.

Otro dato significativo es el incremento del uso por bicicleta: actualmente cada una de las sítycletas se usa una media de 4 veces al día, es decir, un 25% más que en el mes de agosto.

Con tan solo año y medio de vida, el sistema de bicicletas públicas ya acumula casi 300.000 cesiones, superando la barrera de los 20.000 usos totales en septiembre. En concreto, el mes pasado se registraron un total de 21.207 alquileres, lo que supone casi un 15% más respecto al mes de agosto.

Durante el mes de septiembre también se batió el récord de usos diarios de la Sítycleta: hasta 10 veces se alcanzó la cifra máxima de usos, siendo el 25 de septiembre el día en el que se registró el dato más alto, llegando a los 950.

Precisamente, este incremento en el uso de bicicletas públicas ha motivado la ampliación de varias de las estaciones con mayor demanda. En concreto, se han instalado cinco anclajes más en las siete estaciones de Sítycleta con mayor número de alquileres diarios: el Parque de Santa Catalina, la Base Naval, la plazoleta de Farray, San Telmo, la Plaza O'Shanahan, la Plaza de La Feria y el edificio Woermann.

En general, y atendiendo a los datos de este último año, el uso entre semana de la Sítycleta está estrechamente ligado a la movilidad laboral, mientras que los fines de semana se detecta un uso más vinculado al ocio. Así lo demuestran los picos de uso, que de lunes a viernes se experimentan de 7.00 a 8.00 horas, de 14.00 a 15.00 horas y, por último, de 18.00 a 19.00 horas. Los fines de semana, el mayor pico de uso se detecta entre las 11.00 y las 12.00 horas, lo que se entiende como un uso más vinculado con el traslado a lugares de ocio y descanso dentro de la ciudad.

Según el concejal, "los datos globales del servicio público de bicicletas compartidas son realmente notables". En este sentido, Ramírez ha recordado que "a lo largo del año y medio del servicio, se han acumulado un total de 105.961 horas de uso y un total de 1.589.415 kilómetros recorridos, o lo que es lo mismo: el uso de la Sítycleta ha evitado la emisión de un total de 267 toneladas de CO2 en nuestra ciudad".