El agente de Movilidad acusado de cohecho continuado por pedir dinero a conductores a cambio de evitarles una multa, deberá someterse a "tratamiento de rehabilitación" para evitar entrar en prisión.

El juicio contra C.I.D. no llegó a producirse porque las partes llegaron a un acuerdo previo de rebaja de la condena. El jurado, que se había personado en la sala 17 de la sección VI de la Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria, ni siquiera se constituyó, ya que defensa y acusación aceptaron las "conclusiones modificadas de las acusaciones".

El Ministerio Fiscal solicitaba una condena de dos años, tres meses y un día de prisión con la inhabilitación para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante cinco años, así como para el ejercicio del cargo de agente de Movilidad, funcionario de la Policía Local o cualquier empleo público relacionado con la seguridad vial durante cinco años. Además, el encausado deberá pagar una multa de seis euros al día durante nueve meses y un día, con "responsabilidad penal subsidiaria de un día de prisión" por cada dos cuotas impagadas.

El acuerdo establece que C.I.D. tiene dos meses para aportar la certificación de haberse sometido al "tratamiento de rehabilitación", en el que deberá permanecer hasta su finalización. Además, el acuerdo está supeditado a la "no comisión de nuevos delitos" durante el mismo periodo de cuatro años.

En el momento de los hechos, ocurridos los días 20 y 23 de febrero de 2017, el agente presentaba un "cuadro de trastorno" por consumo "leve-moderado" de cocaína, lo que incurrió como "circunstancia atenuante".