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El cambio de las boyas obliga a sacar las barquillas fondeadas en La Puntilla

La Concejalía de Ciudad de Mar reacondicionará el canal de entrada y salida y aprovechará para evitar la proliferación de embarcaciones sin autororización

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Barquillas en La Puntilla

Unas obras de mejora en el balizamiento de Las Canteras obligarán a sacar las barquillas fondeadas en La Puntilla. El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha dado de plazo a los propietarios una semana, el cual expira el próximo miércoles, para que estos se trasladen a una serie de lugares alternativos propuestos por la concejalía de Ciudad de Mar. Según dicta la resolución publicada por el Consistorio la semana pasada, los trabajos permitirán reacondicionar el canal de entrada y salida a la arena de la playa y regular la zona, ante la proliferación de embarcaciones sin autorización municipal o de Capitanía Marítima.

El Ayuntamiento capitalino se ha visto obligado a tomar esta decisión ante el "estado de deterioro" en el que se encuentra el citado canal, especialmente los amarres de boyas y muertos, que son las losas de piedra que sujetan estas al fondo marino, tal y como especifica el documento al que ha tenido acceso este diario. Además, el mismo señala que "la proliferación de embarcaciones fondeadas en zona de baño sin autorización" es otro de los motivos por el cual la concejalía que dirige José Eduardo Ramírez ha procedido a resolver a favor de sacar las barquillas atracadas en La Puntilla.

Lo cierto es que en la mañana de ayer todavía eran numerosas las pequeñas embarcaciones de pesca amarradas en la citada zona de Las Canteras. El Ayuntamiento ha habilitado dos lugares alternativos para estas. Por un lado, la zona de fondeo de Peña la Vieja, a la altura de Peña la Vieja. Por otro, los propietarios también podrán dejar varadas las barquillas en la propia playa entre las calles de La Naval y Prudencia Morales, donde habitualmente ya lo hacen.

Cuando terminen los trabajos del nuevo balizamiento "solo se permitirá el fondeo y varado a las embarcaciones autorizadas por la concejalía de Ciudad de Mar y/o Capitanía Marítima", según refleja el documento. Este especifica que las barquillas que carezcan de permisos administrativos deberán "abandonar las playas de la ciudad".

Al mismo tiempo, el documento señala que "toda embarcación que no haya sido retirada por su propietario" el Ayuntamiento la trasladará a los depósitos municipales. Serán los dueños de estas barquillas quienes tendrán que hacerse cargo de los gastos económicos de retirada y almacenamiento. Además, el Consistorio especifica que no se hará responsable de los posibles daños o desperfectos que sufran los botes en el traslado desde la playa.

Los técnicos de Ciudad de Mar especifican que los propietarios de las barquillas que retire el Ayuntamiento tendrán dos meses para interponer un recurso contencioso administrativo ante el Juzgado correspondiente; el cual comenzará a correr una vez estos reciban la notificación correspondiente. El documento también indica que estos podrán interponer un recurso de reposición, de manera previa a la vía judicial, para lo que tendrán un mes de plazo.

Esta reordenación de las barquillas fondeadas en La Puntilla se realiza aprovechando que el próximo 30 de abril expira la vigencia de los actuales permisos para atracar en esta parte de la zona de baño de Las Canteras. No obstante, se trata de la fecha límite de los permisos que otorga de manera temporal la Demarcación de Costas para la ocupación de terrenos de dominio público. En este caso, las autorizaciones que ahora expiran se atribuyeron para el cuatrienio de 2016-2020.

La estampa de las barquillas fondeadas en La Puntilla es una de las más fotografiadas por los turistas que visitan la capital grancanaria. La de los pescadores ha sido una imagen icónica durante mucho tiempo, aunque esta no ha sido la única ocasión en la que el Ayuntamiento ha decidido sacarlas de manera provisional y obligada para realizar trabajos en la zona. En 2009, por ejemplo, varios propietarios se negaron a retirar sus embarcaciones ante "el miedo" a la reducción del número de lanchas permitidas en la zona.

Y lo cierto es que aquel año, en 2009, la concejalía de Playas resolvió reducir a casi la mitad el número de embarcaciones que pueden fondear en La Puntilla. De unas 80 a tan solo 50. Mientras, permitieron otras 20 plazas en Peña la Vieja, lugar al que en esta ocasión deberán ir las barquillas desplazadas. Se trata de unos permisos que han ido renovándose por temporadas.

La actual ordenanza de Playas de la capital prohibe la pesca desde barquillas, a motor o a remo, en la dársena interior de Las Canteras, dentro de la Barra. También está vetada la circulación por la misma a las embarcaciones de más de seis metros de eslora. Estas solo podrán estar fondeadas en las zonas autorizadas, previa licencia de Costas.

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