El parque Juan Pablo II es la viva imagen del abandono, con un lago, del que solo queda una lona blanca y seca, pues el agua desapareció hace más de tres meses.

Pese a que la concejala de Parques y Jardines, Servicios Públicos, Agua y Carnavales, Inmaculada Medina, aseguró a principios de noviembre pasado que el lago se estaba vaciando para proceder al arreglo de la avería que había provocado la pérdida del agua, los vecinos siguen esperando por las obras y por la vuelta de los cisnes, que fueron trasladados al estanque del parque Doramas.

La asociación de vecinos de Siete Palmas denunció ayer el pésimo estado en que se encuentra desde hace meses el lago, del que sólo queda la estructura.El abandono que sufre el parque ha afectado también a la estructura de piedra que rodea un pequeño estanque situado enfrente del lago, también seco, algunas de cuyas piedras se han venido abajo debido a la falta de mantenimiento. El servicio de Parques y Jardines ni siquiera se ha molestado en retirar las piedras.

Un lago seco

Zebenzuí Ramos, portavoz de la asociación de vecinos, solicitó a la concejala Inmaculada Medina que saque a concurso la obra para volver a poner en funcionamiento lo antes posible el lago que, recordó, era un atractivo del barrio de Siete Palmas.

"Mucha gente iba al parque para ver los cisnes y los patos y el lago lleva varios meses seco y abandonado", se quejó Ramos, quien añadió que el recinto tiene muchos más problemas, aunque la asociación, de momento, va a centrar sus críticas en la desaparición de la charca.

Medina ha respondido en el facebook a las críticas de la asociación de vecinos, asegurando que la actuación que hay que hacer para recuperar el lago "no es una simple obra de arreglo, sino que requiere un proyecto, presupuesto, licitación y adjudicación".

Añadió que con la entrada en vigor de los presupuestos municipales de este año, que se aprobaron en el pleno municipal del pasado mes, se podrán hacer las obras.

La concejala pidió "disculpas" a los vecinos por las "molestias ocasionadas".

Según indicó Medina hace tres meses, la desaparición del agua estuvo provocada por una avería, que provocó las filtraciones. Añadió que se estaba vaciando el lago para proceder a su arreglo y aseguró que los cisnes volverían al parque cuando culminaran las obras y el lago recuperara el agua.

Las aves se encuentran desde entonces en el parque Doramas, según aseguraron desde Parques y Jardines.

El mal estado del parque Juan Pablo II ha provocado las quejas de muchos vecinos del barrio de Siete Palmas desde hace meses. Los residentes se quejan también del mal estado en que se encuentra el parque para perros. Al respecto, aseguran que está "totalmente destruido", debido a la falta de mantenimiento. Las quejas vecinales se dirigen también al pésimo estado de los árboles y el resto de la vegetación, afectados por la mosca blanca.