La Fiscalía Provincial de Las Palmas solicita penas de hasta 34 años de cárcel a los cinco acusados de propinar una brutal golpiza y asesinar al italiano Davide Fervorini, en septiembre de 2018 para robarle 8.500 euros que había obtenido producto del traspaso de una asociación de cannabis que este regentaba en la calle Juan Rejón de la capital grancanaria.

El escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Público revela que la acusada Sophia Valinhas G. B., de 25 años, nacida en Brasil y en situación irregular en el país, mantenía una relación de amistad con la víctima por lo que se enteró de que el perjudicado traspasaría el club de Cannabis de Ola Verde y que por ello obtendría 8.500 euros. Una vez que la procesada y autora confesa de los hechos se enteró de que ya Fervorini había recibido el dinero se lo comunicó a Adonay Santiago G. C., de 23 años, y juntos "decidieron sustraerle el dinero".

Para lograr su objetivo, los encausados propusieron a Rubén P. S., de 27 años, Alejandro A. S. de 26 y a Wilson Enrique Q. B., de 28 años que participasen en el hecho delictivo a lo que estos aceptaron.

El crimen ocurrió el 11 de septiembre de 2018 cuando Adonay Santiago envió, con consentimiento de Sophia Valinhas, un mensaje de texto a la víctima haciéndose pasar por la encausada con el fin de quedar con el perjudicado, quien en todo momento creyó que se reuniría a solas con esta para intimar. La cita fue en una construcción abandonada que está situada al final de una carretera asfaltada en Barranco Seco que "era un alpendre y donde antiguamente se guardaba el ganado vacuno sin iluminación artificial".

Rubén P. S., Alejandro A. S., y Wilson Enrique Q. B., subieron a una casa en Valleseco donde se encontraba el también procesado Adonay y Sophia, y fue ahí donde "pactaron acabar con la vida de Davide Fervorini para robarle en su casa". Por lo que sobre las 22.00 horas, "ejecutando el plan preconcebido", los cinco investigados acudieron al lugar de la cita que supuestamente tendría la víctima solo con Sophia. Los cuatro hombres que iban con pasamontañas y guantes, se escondieron mientras que la autora confesa acudió al encuentro con el perjudicado.

Cuando Sophia y Fervorini se encontraron, los otros cuatro acusados sorprendieron a la víctima y se "abalanzaron" sobre él, acto seguido le aplicaron la técnica del mataleón, consistente en estrangular a la víctima oprimiendo del cuello para evitar el paso de oxígeno y sangre, y cuando perdió parcialmente el conocimiento le propinaron puñetazos, patadas y golpes con un bate de béisbol en todas las partes del cuerpo. Después lo estrangularon y "estando en un estado de total y evidente indefensión", los procesados cogieron una piedra de grandes dimensiones y se la arrojaron "con contundencia" sobre la cabeza en al menos dos ocasiones y hasta que acabaron con la vida del italiano.

Durante la brutal agresión, Sophia Valinhas permaneció en el lugar escuchando los golpes y puñetazos y "sin hacer nada a sabiendas de las intenciones de los cuatro acusados". Los hombres se sustrajeron las llaves de su casa, el móvil y la cartera en la que tenía 100 euros.

Tres horas después de ejecutar el crimen en el que "adoptaron comportamientos de total frialdad", sobre las 1.52 horas del 12 de septiembre los cinco encausados acudieron a la vivienda del fallecido en Las Palmas de Gran Canaria, "puestos de común acuerdo y con ánimo de obtener un enriquecimiento ilícito" y con las llaves que ya le habían sustraído a la víctima entraron en la vivienda Rubén, Alejandro y Wilson mientras Sophia y Adonay vigilaban. Los acusados se apoderaron de varias plantas de marihuana, un televisor, una barra de sonido y un reloj Casio G-Shock pero no consiguieron los 8.500 euros del traspaso del club, dinero que fue "recuperado por la policía en el registro practicado durante la investigación de los hechos".

El cadáver de Davide Fervorini fue hallado cinco días más tarde, el día 16 septiembre de 2018. Según la autopsia, el italiano murió por un shock traumático causado por un traumatismo craneal y torácico. El cadáver presentaba una herida inciso contusa lineal de cinco centímetros de longitud localizado en región parietal izquierda y otra con bordes mal definidos en la región frontal izquierda de tres centímetros. También presentaba fracturas en cabeza, mandíbula, en la región maxilar y en varias costillas.

Tras la detención de Sophia Valinhas, Adonay Santiago y Rubén P. S., la policía llevó a cabo un registro en varios domicilios, incluyendo el de Adonay Santiago en Valleseco donde consiguieron un kilogramo de hachís en trozos, 34 envoltorios de MDMA, dos envoltorios de cocaína con 0,78 gramos y una riqueza media de 79,25%, dos terminales de móvil, un portátil y 2.615 euros procedente de la venta de estas sustancias ilícitas.

En la vivienda de Rubén P. S., situada en Valleseco, hallaron 2.2 kilos de hachís, ocho gramos de heroína, tres ordenadores portátiles y 302 euros producto de la venta de dichas sustancias. Mientras que en un vehículo Audi A3 alquilado por dicho encausado se encontró el reloj Casio sustraído de la casa de la víctima, así como una báscula de precisión de color rojo.

En el domicilio de Layonel P. S., en la capital grancanaria se encontraron 2.5 kilos de hachís, dos móviles y 25 euros. Este hombre no está acusado de participar en el asesinato de Davide Fervorini.

Por todo esto, la Fiscalía solicita 25 años, seis meses y un día de prisión para Sophia Valinhas G. B., por los delitos de asesinato y robo con fuerza en casa habitada, aplicando la atenuante de confesión y la solicitud de no expulsión del territorio español durante el tiempo que dure la condena. La autora confesa está en prisión provisional desde el 7 de diciembre de 2018.

Para el acusado Rubén P. S., en prisión provisional desde el 7 de diciembre de 2018, le solicita una condena de 34 años de cárcel por asesinato, robo con fuerza en casa habitada, un delito de salud pública con las agravantes de reincidencia respecto al robo y de difraz y aprovechamiento de la situación. Para Adonay Santiago G. C., en prisión provisional desde el 7 de diciembre de 2018, requiere la pena de 33 años de prisión por asesinato, robo con fuerza en casa habitada y un delito de salud pública. Respecto a Alejandro A. S., y a Wilson Enrique Q. B., la acusación pública pide para cada uno de ellos 28 años de prisión por asesinato y robo con fuerza en casa habitada, estos están en prisión provisional desde el 13 de diciembre de 2018,. Además, en todos ellos concurre la circunstancia agravante de disfraz y aprovechamiento de la situación.

Los efectos sustraídos a la víctima están tasados en 824 euros. Estos cinco procesados deberán indemnizar a los herederos de Fervorini conjunta y solidariamente en la cantidad de 120.000 euros.

En cuanto a Layonel P. S, la Fiscalía pide cuatro años y seis meses de cárcel por un delito de salud pública.