El portavoz del grupo municipal de Coalición Canaria-Unidos por Gran Canaria en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Francis Candil, tras la negativa del tripartito a dar explicaciones en el Pleno extraordinario celebrado el pasado viernes a petición de la oposición sobre los controles que el Ayuntamiento ejerce sobre Emalsa, afirmó ayer que "resulta muy triste y desolador que el alcalde de Las Palmas de Gran Canarias, Augusto Hidalgo, diga que al abrir el grifo sale agua, para minimizar la gravedad del Caso Emalsa". Y añadió: "Es lamentable que este Ayuntamiento, que dice querer aclarar todo lo que ha pasado, que dice que ha presentado un escrito de acusación que es más duro que el que ha hecho la propia fiscal, cuando ha tenido la oportunidad de empezar a esclarecer todo lo que ha pasado en Emalsa, lo que ha hecho es poner impedimentos para que se celebrara un Pleno que era necesario para esclarecer los distintos extremos de la gestión. Pero sobre todo, lo más desolador es que el alcade y su gobierno no hayan hecho absolutamente nada en los cinco años que lleva gestionando este Ayuntamiento por corregir la situación que denuncia la fiscal en su escrito de acusación, porque muchos de esos contratos que son objeto de investigación siguen en vigor".

Al respecto, Francis Candil recordó que este Ayuntamiento no ha tomado ninguna medida ni ninguna decisión, "pero además trata a los vecinos de la ciudad como si fueran tontos, diciendo que al ser un caso que se está investigando por parte de la justicia, con un sumario abierto, ellos no pueden tomar ninguna decisión". Y argumentó: "Ya deberían estar tomando decisiones sobre lo que está pasando en Emalsa y devolver el control de esta empresa la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria".

En este sentido, el edil de Coalición Canaria-Unidos por Gran Canaria, señaló que existen herramientas en el derecho administrativo, en la parte que gestiona el Ayuntamiento, que hace tiempo se debía haber empezado a corregir.