Guanarteme se rinde a satisfacer las necesidades de sus vecinos más peludos. El barrio de Las Palmas de Gran Canaria inaugura el primer spa para perros de Canarias, un modelo de negocio que se extenderá a otro barrio de la ciudad y que, en palabras de su propietario, Miguel López, se caracteriza por ofrecer "un servicio cómodo, segura y ecológico" a los propietarios de las mascotas para mantenerlas aseadas y cuidadas.
El mimo a los animales no es nuevo pero este ingeniero y emprendedor grancanario vio en este servicio, que conoció en la Península, la manera de darle una vuelta de tuerca a los habituales cuidados de las mascotas.
"Quien más quien menos, con perros más grandes o más pequeños, se ve en la obligación de lavarlo en casa con todos los problemas que eso generalmente provoca de suelos de baño enchumbados, toallas sucias, pelos, derroche de agua... Y además, muchas veces no nos damos cuenta de que cada animal tiene un tipo de pelo y piel diferente y los lavados no pueden ser iguales porque acabamos dañándoles en vez de cuidándolos", explica este emprendedor.
El concepto de spa que ofrece Lavakan, que es como se llama este innovador negocio, es poner a disposición de los clientes una máquina profesional tipo cabina que ofrece desde el lavado automático con chorros a distintas temperaturas como posterior enjabonado y finalmente aclarado además de secado con secador, todo de un modo sencillo de empleo gracias a una pantalla que va indicando al cliente los siguientes pasos. "Casi todo lo puede hacer la máquina sola o bien el cliente, que podrá emplear de manera manual los dispositivos" que posee la cabina. "Podremos hacerlo tan solo pulsando en la pantalla y pausando el proceso para poder frotarlo o si lo deseas eliges los baños a modo manual. Lo bueno es que al ser unas cabinas con mamparas transparentes el animal siempre va a ver a su propietario cerca, lo que le genera más tranquilidad al animal", explica Miguel López antes de contar que en este spa para perros se preocupan también por el cuidado al medio ambiente.
"Cada baño tiene un consumo inferior a 30 litros y además el consumo eléctrico es mínimo", destaca este ingeniero sobre los beneficios de estas máquinas que, asimismo, cuentan con un sistema de filtrado "para que no se lance ningún residuo de pelos al desagüe".
En el año 1999, tras inventar la primera cabina spa de hidromasaje para mascotas, un equipo humano de técnicos e informáticos, atendiendo a los consejos de peluqueros y veterinarios, se lanzaron a perfeccionar las cabinas para perros y posteriormente a crear el concepto spa.
"La innovación consistía en ofrecer una solución más cómoda y rápida al sistema tradicional, al mismo tiempo que permitíamos al propietario realizar tratamientos para la piel de cada can", cuenta Miguel López.
En el año 2000, la idea se expande internacionalmente exportándola a numerosos países entre los que destacan Estados Unidos, Francia, Italia, Bélgica, Holanda, Noruega, México, Portugal, Guatemala, Ecuador, Japón, Australia, Nueva Zelanda, Emiratos Árabes, Arabia Saudí, Corea, India o Venezuela, entre otros.
El perfil de cliente es amplio porque, según explica López, "cada vez hay en las ciudades más mascotas y las tratamos mejor, además de que tenemos precios económicos: si te haces socio obtendrás mayores descuentos".
Distintos tipos de gel para cada clase de pelaje -las cabinas tienen capacidad para todos los tamaños de mascotas- completan la oferta de este novedoso centro de belleza animal del cual el viernes nuestra modelo Liv, salió echa una verdadera princesa. Canina, claro.
