España pedirá el martes a la Unión Europea (UE) la renegociación del acuerdo pesquero con Mauritania con el objetivo de que incluya "soluciones" a los problemas que, en los términos actuales, genera para el sector, informaron ayer fuentes diplomáticas. El asunto se tratará, a petición de la delegación española, en el apartado de puntos "varios" de un Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca. El ministro español del ramo, Miguel Arias Cañete, trasladará a la Comisión Europea y a los países de la UE la necesidad de "buscar soluciones pragmáticas que se acomoden al sector, a los países de la Unión y a Mauritania".

El protocolo firmado con el país africano el pasado 26 de julio "no está teniendo el respaldo sectorial que se esperaba", ya que los barcos no están acudiendo al caladero, lo que crea "un problema que hay que solucionar entre todos", indicaron las fuentes. España espera que la Unión encuentre una salida a la situación creada por un convenio cuyas condiciones técnicas conllevan que "no se puede usar el caladero porque no es económicamente rentable".

El nuevo convenio excluye de las aguas mauritanas a la flota cefalopodera (pulpo y calamar), lo que afectó a buques de Canarias y Galicia, y además fija condiciones muy estrictas para los marisqueros, con lo que este segmento de flota, de origen andaluz, decidió retirarse del caladero. Las delegaciones de Países Bajos, Lituania, Letonia y Polonia han expresado ya su intención de intervenir también sobre este asunto en la reunión

La Asociación Nacional de Armadores de Buques Congeladores de Pesca de Marisco (Anamar) considera que en estos momentos la posibilidad de la flota marisquera de volver a faenar en Mauritania "se ve muy lejos".

En declaraciones ayer a Efe, el presidente de Anamar, Ángel Muriel, indicó que, pese a que el sector sigue manteniendo que la solución a la situación actual generada por el convenio "inasumible" firmado el pasado julio entre la UE y Mauritania "es posible", el camino para conseguirlo es largo. Muriel se refirió a la reunión que como representante mantuvo el pasado miércoles con la comisaria de Asuntos Marítimos y Pesca, María Damanaki, precisando: "No sacamos una impresión ni positiva ni negativa, seguimos con todas las expectativas abiertas".