El empresario José Miguel Suárez Gil se ha conformado hoy con una pena de un año de cárcel por los delitos de amenazas y coacciones a su mujer, la abogada Josefina Navarrete, tras comparecer ante la juez del Juzgado de Violencia sobre la Mujer Número 2 de Las Palmas de Gran Canaria.

Según informa un comunicado del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, Suárez Gil además ha aceptado que se le impongan 3 años de privación del derecho a la tenencia y porte de armas, y la prohibición de aproximarse y comunicarse con Navarrete por cualquier medio durante tres años.

La nota señala que la juez, María Auxiliadora Díaz, ha procedido a la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad sin oposición de las partes, pero el empresario, que fue parlamentario regional y presidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas, deberá seguir llevando la pulsera localizadora que se le colocó el pasado 19 de enero cuando quedó en libertad provisional sin fianza.

Suárez Gil fue detenido el pasado día 4 de enero después de que presuntamente amenazará y encañonara con una pistola a su esposa, la abogada penalista Josefina Navarrete, quien había acudido ese día en compañía de una amiga a la casa del barrio residencial de Tafira Baja que ambos compartieron en Las Palmas de Gran Canaria con el fin de retirar sus enseres personales, pues existían problemas en la relación de la pareja.