Regalos.

Los vecinos afectados coinciden en el temor de lo que hubiese pasado si los robos, en vez de producirse durante los últimos meses, tienen lugar ahora, cuando guardan todos los regalos en los trasteros. "De cara a las navidades nadie va a dejar nada en los trasteros", dice Santiago Gómez, conserje de Urbis La Minilla.

Candados.

El problema que existe con las puertas es que "se pueden abrir fácilmente, porque forzándola se arruga", señala el cerrajero Ángel Santana, quien añade que una vez rota la puerta "hay que sustituirla por completo", aunque también algunos afectados instalan unos candados para mayor seguridad.