Las Palmas de Gran Canaria 2016 cambiará la realidad de los cuatro riscos. La candidatura ha apostado desde el principio por revitalizar estos barrios que tradicionalmente se han visto marginados en lo alto de las laderas del barranco Guiniguada.

La propuesta se dirige a reconvertir locales o solares en espacios culturales, sociales o de ocio con pequeñas actuaciones. Es lo que fue acuñado por el brasileño Jaime Lerner como acupuntura urbana, es decir, transformar los espacios disponibles utilizando la pala lo menos posible. Una manera de actuar ideal en lugares con gran densidad de población y pocas posibilidades de expansión como es este caso.

"Muchas veces no es necesario construir, sino recuperar cosas viejas que todavía se conservan relativamente bien", explica Esther Azpetia, arquitecta de la asociación sin ánimo de lucro Hurbmana, promotora de estas propuestas.

Construidos por los propios vecinos hace décadas, estos barrios fueron creciendo sin ningún orden ni previsión, por lo que todavía muchas viviendas carecen incluso de conexión a la red de alcantarillado. El problema que comparten los riscos es también la falta de espacios comunes que se puede solucionar con estas intervenciones urbanas a pequeña escala. Esto es, sin grandes aspavientos y prácticamente sin tener que hacer grandes obras, algo que por otra parte se convierte casi en necesario en momentos de recesión económica.

Los lugares en los que se podría actuar en un futuro han sido escogidos por ser de titularidad municipal, por estar calificados como dotaciones o por tener unas condiciones idóneas para convertirse en espacios públicos. Incluso, como en el caso de San Nicolás, estos inmuebles pueden formar parte a su vez de un recorrido cultural que propicie en el barrio "la relación, generación y expansión de su cultura", añade Azpetia.

Asimismo, pueden funcionar como motores de desarrollo económico dentro del mismo barrio, así los vecinos que vivan o tengan propiedades cerca de estos lugares podrán generar nuevos negocios de los que la zona carece en la actualidad, como pueden ser cafés, teterías, piscolabis, cafeterías, cibers o restaurantes. La idea es darle a los vecinos de San Nicolás, San Roque, San Juan y San José todos los medios para que luego ellos mismos sean los que gestionen y cuiden estos nuevos espacios.