El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Cardona, dio ayer un voto de confianza a la plantilla de la Policía Local asegurando que no se plantea retirar las armas a estos agentes un día después de que dos de ellos resultasen heridos por, supuestamente, manipular de forma indebida una pistola en la sala municipal de Control de Tráfico.

"Yo creo que los agentes de la Policía Local, como ocurre con los de la Policía Nacional y los de la Guardia Civil, son profesionales y partiendo de esa consideración lógicamente ellos conocen y saben muy bien cuáles son sus obligaciones y responsabilidades", dijo el alcalde. Cardona afirmó que no retiraría las armas de fuego de manera general a los agentes municipales porque en el ejercicio de la autoridad que se les encomienda éstas son "sus herramientas".

El regidor sí dejó abierto el camino en un hipotético futuro a limitar el acceso con armas a ciertas dependencias municipales. "Sería precipitado por mi parte hacer valoraciones y sacar conclusiones sin conocer con precisión cuáles han sido las circunstancias que han rodeado estos hechos; por eso, una vez que las conozcamos haremos valoraciones y veremos si tomamos decisiones de ese tipo", dijo.

En cuanto a los detalles del incidente ocurrido en la sala de Control de Tráfico entre los dos agentes heridos, Cardona también se mantuvo precavido. "Hay una investigación interna de la propia Policía Local, que dice que, lógicamente, se trata de un accidente, pero creo que debemos ser prudentes y esperar al informe definitivo y a la conclusión de las diligencias informativas abiertas al efecto. Hasta entonces el alcalde de la ciudad será cauto y prudente a la hora de hacer declaraciones. Eso sí, yo tengo el absoluto convencimiento de que estamos ante un accidente. Yo en este minuto descarto cualquier otra circunstancia pero en los próximos días podremos conocer con mayor rigor y precisión que es lo que realmente sucedió en la mañana de ayer [jueves]", concluyó.

Por otra parte, ayer fue dado de alta del hospital Doctor Negrín el oficial Domingo M.A., que resultó herido en una mano y al que, supuestamente, se le disparó el arma -una HK Compact de 9 milímetros- que causó el incidente. El otro herido y compañero del anterior, el policía de barrio Agustín S. M., sí se mantiene hospitalizado al recibir el impacto de la misma bala que perforó la mano al oficial en el hígado y un riñón. El agente se encuentra en la UMI (Unidad de Medicina Intensiva) del Doctor Negrín, donde permanecerá en observación durante todo el fin de semana.

El Ayuntamiento, además, informó ayer que la investigación interna abierta para esclarecer los hechos va a quedar en suspenso en tanto en cuanto no se resuelvan las diligencias judiciales abierta por el Cuerpo Nacional de Policía que interviene en el esclarecimiento de los hechos por los que se disparó el arma.