"Estoy a la espera de que el comité de empresa dé señales de vida para firmar y, o se decide, o meto en el congelador el Plan de Consolidación y que decida la próxima corporación". Así de tajante se mostró ayer el concejal de Organización y Recursos Humanos de la capital grancanaria, Augusto Hidalgo, tras conocer las trabas de Intersindical Canaria, el sindicato con más delegados del Ayuntamiento, a la propuesta que garantiza el acceso a la plantilla municipal de unos 700 trabajadores laborales.
El concejal se siente defraudado. "He sido sindicalista y no lo entiendo. Llevamos dos años negociando este plan, que se podía haber firmado antes. Yo ni siquiera quería que llegásemos a diciembre sin el acuerdo cerrado, y ahora estamos a las puertas de las elecciones y nada", se quejó amargamente Hidalgo.
El alcalde Jerónimo Saavedra fue incluso más pesimista que su concejal. "El tema no se ha resuelto a nivel de comité de empresa porque los sindicatos están divididos y sus batallas tienen que resolverlas ellos", dijo. El regidor se mostró muy molesto por la noticia difundida por este periódico, tachándola de "frivolidad" y considerándola "falta de ética" a pesar de que está avalada por el edil Augusto Hidalgo.
Saavedra, quien negó que regale puestos de trabajo, también imputa a este diario un titular "claramente intencionado" para perjudicarle desde el punto de vista electoral, pese a que se citó expresamente que los laborales afectados fueron contratados antes de que él fuera alcalde.
