El sueño se esfumó en un segundo. Lo que tardó el austríaco Manfred Gaulhofer en leer: Donostia-San Sebastián. La ciudad guipuzcoana será la Capital Europea de la Cultura 2016 en representación de España, una decisión que borró de un plumazo las ilusiones y las esperanzas de Las Palmas de Gran Canaria que también optaba al mismo honor.

La decisión del jurado formado por 13 miembros elegidos por la UE y el Ministerio de Cultura y presidido por Gaulhofer, no estuvo exenta de polémica ya que la razón fundamental para designar a San Sebastián fue que la capitalidad cultural ayudará a "superar" la situación de violencia en la que vive la ciudad y toda Euskadi por culpa del terrorismo de ETA. Estos criterios fueron censurados por los miembros de la delegación de Las Palmas de Gran Canaria que censuraron que le jurado no primara en su elección los valores puramente culturales de las seis ciudades finalistas.

No obstante, el alcalde de la ciudad, Juan José Cardona, consideró que la ciudad "tiene un proyecto a desarrollar, con o sin capitalidad cultural" y que, pese a la decisión de hoy "mañana hay que volver a levantarse y a seguir trabajando". En este sentido dijo estar "orgulloso" del trabajo realizado por su predecesor Jerónimo Saavedra y antes de fundirse con el exalcalde en un abrazo destacó que "hoy somos mejores que ayer, porque este proyecto nos ha unido más y nos ha hecho trabajar juntos".

Representantes de las otras cuatro candidatas -Burgos, Segovia, Zaragoza y Córdoba- no dudaron en tachar de "disparate" y "magnífico error" la elección de la ciudad donostiarra gobernada desde hace 15 días por la coalición abertzale Bildu. El alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, dio las gracias y las felicitaciones en euskera durante el acto oficial de la lectura del fallo celebrado ayer en el Ministerio de Cultura, en Madrid.

La amarga tarde en la capital española comenzó a las 16.30 cuando la delegación canaria llegó al Ministerio. El alcalde Juan José Cardona encabezaba el grupo en el que también ocuparon puestos destacados el exalcalde e impulsor del proyecto, Jerónimo Saavedra, el presidente del Cabildo, José Miguel Bravo de Laguna y el presidente en funciones del gobierno canario, Paulino Rivero, recién llegado desde Gran Canaria donde por la mañana asistió a los funerales de los militares muertos en Afganistán.

El acto celebrado en el auditorio del Ministerio comenzó con un gran caos por la llegada en cascada de las delegaciones de las cinco ciudades finalistas y la gran cantidad de periodistas acreditados. Manfred Gaulhofer, esperaba impaciente a que se pusiese orden en la sala algo que ocurrió milagrosamente a la hora indicada, las 17.00, justo cuando la ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, entró en el recinto. Ésta felicitó a todas las candidatas y recordó peculiaridades de cada ciudad, diciendo que "todos los grancanarios se sienten ya 2016". No olvidó recordar que su ministerio había velado por la "transparencia" de todo el proceso.

Tras ella, la representante de Cultura de la UE, Ann Branch, reconoció que la elección había sido "muy difícil" por el "gran nivel" exhibido por todas las candidatas. Finalmente, Gaulhofer tomó la palabra y elevó la tensión de la sala a límites insospechados ya que era el encargado de leer la ganadora. El presidente del jurado recordó los principales valores de cada una de las candidatas. De Las Palmas de Gran Canaria señaló que al jurado le atrajo la idea de crear un centro cultural en la ultraperiferia de Europa y reconoció que se sentían impresionados por la alta implicación ciudadana en proyectos como Engánchate al Risco. "No olvidaremos la visita al Risco", dijo recordando su reciente visita a San Nicolás.

Sin embargo, nada de eso valió y sí el proyecto de paz para Euskadi. Por eso los jurados acabaron por elegir Donostia- San Sebastián 2016.