La Concejalía de Ciudad de Mar del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria llevó a cabo una encuesta de cultura de mar en marzo de 2020, cuyos resultados reflejaron que el 48% de los jóvenes de 11 a 19 años de la ciudad conocen la vela latina canaria, mientras que aquellos que la han practicado alguna vez representan el 11,6%. A raíz de este estudio el Consistorio ha llegado a un acuerdo con la Federación de Vela Latina Canaria de Botes para el desarrollo y la promoción de esta modalidad deportiva en la capital.

La Junta de Gobierno ha autorizado la firma del convenio y la subvención nominativa por importe de 15.000 euros. El edil de Ciudad de Mar del Consistorio capitalino, José Eduardo Ramírez, resaltó que “se trata del primer acuerdo de estas características que se firma entre el Ayuntamiento y la Federación de Vela Latina Canaria y permitirá desarrollar actividades de acercamiento a esta actividad deportiva, dirigidas a los habitantes del municipio”.

En este sentido, Ramírez aseguró que “este convenio pretende aumentar esas cifras para popularizar, en la medida de lo posible, el conocimiento y la práctica de este deporte, a través de diversas actividades y acciones de promoción”. “En última instancia, fomentar la vela latina canaria en la capital, especialmente entre los jóvenes, es mejorar la cultura de mar en la ciudad”, concluyó.

El convenio pretende abrir las instalaciones de la vela latina canaria a toda la sociedad, facilitando acciones náuticas que maximicen su potencial y generen sinergias con otras regatas u otras actuaciones de promoción de la náutica, de interés estratégico nacional e internacional para la ciudad.

La vela latina canaria es un deporte tradicional que únicamente se practica, con características propias y distintas al resto de las islas, en la bahía de Las Palmas de Gran Canaria, datando sus orígenes del final del siglo XIX. El Gobierno autonómico la declaró Bien de Interés Cultural en el año 2016. Así, el desarrollo y la práctica de la vela latina canaria están vinculados a un importante patrimonio intangible asociado a técnicas y conocimientos de navegación y al que se añaden otras actividades, como la desarrollada por los carpinteros de ribera. La promoción de esta actividad genera de esta forma riqueza y empleo en el sector marino marítimo y en el subsector económico asociado a la vela ligera. Así, el acuerdo recoge también la necesidad de fomentar los activos intangibles de la vela latina canaria como elemento tractor del empleo, directo e indirecto.