El jurado de la Audiencia de Las Palmas ha considerado culpables de un delito de malversación de caudales públicos a los acusados Rafael Suárez y Carlos Orce, por haber modificado el concepto de la factura de 3.500 euros del catering que se sirvió en el congreso del CCN en Infecar en 2015 por el de un taller infantil para lo que pagase el Cabildo.

El tribunal del jurado ha dado lectura este viernes a su veredicto, que ha sido aprobado por mayoría, y en su decisión ha acordado por unanimidad que se suspenda la ejecución de la pena de prisión que se imponga a los acusados, aunque se ha mostrado contrario a que puedan beneficiarse de un indulto.

La fiscal y la acusación particular, ejercida por el Cabildo de Gran Canaria, han mantenido su petición de condena de un año y nueves meses de prisión para los dos acusados y de tres años de inhabilitación para trabajar en la administracion pública, si bien no se oponen a que se suspenda la ejecución de la pena.

Las defensas de Rafael Suárez y de Carlos Orce han pedido que se les imponga la pena mínima y que se tenga en cuenta el atenuante de dilaciones indebidas y de haber respondido a la responsabilidad civil exigida.

Ambos representantes de los acusados se han mostrados favorables a las suspensión de la pena, al margen de que recurran la sentencia una vez que se dicte.