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Guanarteme celebra El Pilar en la playa

Los vecinos optaron por Las Canteras ante la anulación de las fiestas por la pandemia del Covid-19 | Los más fieles acompañaron a la virgen en su día grande

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Guanarteme sin fiestas del Pilar Andrés Cruz

Guanarteme, uno de los barrios más populares de la capital, celebró ayer el día grande de las fiestas del Pilar en Las Canteras tras la anulación de sus festejos con motivo de la crisis sanitaria por el coronavirus. Numerosos vecinos aprovecharon el día festivo y los 30 grados de calor para darse un buen chapuzón con el que olvidar este triste y duro año.

No todo fue playa. También hubo tiempo para la devoción como se pudo comprobar a las doce del mediodía en la parroquia del Pilar, con un aforo limitado -120- pero completo dado la señalada fecha. La misa fue oficiada por el sacerdote del barrio Antonio Perera, acompañado del diácono Jacob David Castillo Acosta y del seminarista Daniel Romero de León. El párroco pidió por el barrio y por las familias que lo están pasando mal como consecuencia del virus y de la pobreza. No en vano a los pies del altar había una muestra de los alimentos que se han recogido estos días entre los residentes y los comercios de la zona con el fin de aliviar la situación de los más necesitados.

Una treintena de familias se llevarán los víveres y los productos de aseo recogidos, según indicó ayer el presidente de la comisión de fiestas Simón Alejandro Urbano, que no supo cuantificar los kilos de alimentos que irán tanto a Cáritas Parroquial como a la Asociación Cultural Apilagua, encargada del reparto a través del Banco de Alimentos, dado que hasta este lunes se continuaba recibiendo en la parroquia y en el local de la entidad productos no perecederos.

“No lo queríamos dejar pasar por alto; habitualmente los alimentos se recogen durante la romería pero este año, al no haber fiestas, decidimos hacerlo los días previos al Pilar”, comentó el presidente, que señaló que desde que en el mes de marzo se declaró la pandemia no han dejado de asistir a las familias necesitadas, que se han incrementado de 19 a 36.

Guanarteme celebra El Pilar en la playa Andrés Cruz

La comisión de fiestas ha tratado de infundir ánimo a los vecinos e instaló unos banderines y un cartel de fiestas en la plaza del Pilar con la ayuda del Ayuntamiento pero ayer lo único que evocaba a las fiestas de otros años era el calor. “Nos vemos en el 2021; no pasa nada, le digo a los vecinos. Esto nos está ayudando a reflexionar, a parar, y a reformatear, como digo yo, nuestro modo de vivir”, reflexionaba el presidente de la comisión de fiestas, entristecido por la anulación de los festejos. Lo mismo le ocurría a Pepi González, miembro también de la comisión de festejos y de la Asociación de vecinos La barriada de Guanarteme y Chile. “Lo vivimos con tristeza y resignados pero entendemos que debe ser así por la pandemia. Si entre todos seguimos cumpliendo las medidas de seguridad sanitarias establecidas saldremos adelante”, dijo, apesadumbrada también porque no se haya podido celebrar como se merece el 75 aniversario de la llegada al barrio de las salesianas -22 de octubre 1945- que regentan el colegio de Nuestra Señora del Pilar.

"Nos vemos en el 2021; no pasa nada, le digo a los vecinos. Esto nos está ayudando a reflexionar, a parar, y a reformatear"

Simón Alejandro Urbano - Presidente de la comisión de fiestas del Pilar

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El concejal del distrito Isleta-Puerto-Guanarteme Luis Zamorano también acudió a la eucaristía para mostrar su “respeto, cariño y afecto a los vecinos” pese a no haber celebraciones de ningún tipo, tal y como lo hizo el año pasado. “No podía faltar, soy del barrio, y me tiran las raíces y el cariño por la virgen del Pilar”, manifestó el edil, que creció en Zaragoza hasta llegar hace diez años a Las Palmas de Gran Canaria. “He ido varias veces a la ofrenda de flores y a la fiesta de los infanticos, que se celebra a las cinco de la mañana, peregrinando porque vivía en un barrio rural al lado de Zaragoza”, recordaba.

El edil agradeció la comprensión de los vecinos de Guanarteme, y de otros barrios de su distrito, por la anulación de los festejos ante la grave situación de crisis sanitaria que se vive en el país. “Esperemos que al año que viene podamos resarcirnos de esto”, remató Zamorano, quien recalcó que este año no se olvidara. “Nos ha hecho reflexionar sobre lo que es realmente es importante”, añadió.

Guanarteme celebra El Pilar en la playa

A Celestino Sosa, de 74 años, se le saltaban casi las lágrimas al preguntarle cómo llevaba el que no hubiera celebraciones en su barrio. “Lo llevo fatal, me he criado aquí y desde niño vivo esto”, contestó compungido sin poder acabar la frase.

El hombre, que colabora intensamente en la parroquia del Pilar - “salvo dar misa hago de todo”- había engalanado la fachada de su casa, en Fernando Guanarteme, para seguir con la tradición como también lo habían hecho otros vecinos de Castillejos, Covadonga y Secretario Padilla. Su único consuelo era la cantidad de alimentos que se habían recogido para ayudar a las familias desfavorecidas. “No le sé decir los kilos pero casi igual o más que si hubiera habido romería”, matizó.

En la terraza Rubí también echaban en falta la jarana de un día de fiesta en Guanarteme, mientras atendían a unos cuantos clientes que se tomaban el aperitivo. “No cabría la gente y tendríamos más personal en cocina y en barra”, declaró el encargado Roberto Ramos sobre cómo hubiera sido un día normal de fiesta. Y es que las fiestas populares de los barrios no solo generan diversión y gente en la calle, sino también puestos de trabajo en muchos ámbitos y no solo en la restauración, aunque solo sean por unos días.

Afortunadamente este lunes tenían algunas reservas dada la festividad. Para dichos clientes habían hecho arroz negro además de las tradicionales tapas de carne de cabra y ensaladilla, entre otros platos, que habitualmente tienen en la carta. “Entiendo cómo deben estar los vecinos, yo soy de La Isleta y ya pasé por ello. Aunque, eso sí, no faltaron los voladores”, rememoraba el camarero. En Guanarteme se esperaban también a medianoche.

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