El Partido Popular (PP) en Las Palmas de Gran Canaria informó ayer de que el paro registrado en el municipio se ha incrementado en noviembre un 17,3% respecto al mismo año de 2019, lo que supone que 6.853 personas han perdido sus puestos de trabajo, de acuerdo con los datos ofrecidos por el Observatorio Local del Mercado de Trabajo.

En concreto, Las Palmas de Gran Canaria registra un total de 46.471 parados, de los que 20.751 son hombres y 25.720 mujeres. Por género, en el dato interanual, el número de hombres en paro ha aumentado un 21,23% frente a un incremento más leve (14,31%) en el caso de las mujeres.

A estos casi 46.500 parados se unen otras 33.345 personas que se encuentran afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en Las Palmas de Gran Canaria, sumando un total de 79.816 personas sin empleo, un dato que los populares califican de “muy preocupante”.

Como consecuencia más directa, este grave crisis social ha supuesto que las peticiones de ayuda a ONG y entidades de reparto de alimentos se hayan multiplicado por tres entre marzo y diciembre, según ha confirmado al Grupo Municipal Popular organizaciones del tercer sector tan importantes como Cáritas y Banco de Alimentos.

A pesar de la grave situación por la que atraviesan miles de familias del municipio, el PSOE y sus socios se negaron a declarar el estado de emergencia social el pasado Pleno, al considerar que la situación “no era lo suficientemente grave”.

La declaración del estado de emergencia social permite una tramitación más rápida de las ayudas, acortando los “extensos” períodos de espera desde que un ciudadano pide ayuda a los servicios sociales hasta que se hace efectiva. En la actualidad se están dando cita a dos meses vista y la atención social sigue sin ser presencial.

“La situación social y económica es gravísima mientras el PSOE sigue sin aplicar ni una sola medida de estímulo a autónomos, comercios y empresa, la única vía para mantener el máximo número de puestos de trabajo”, señaló.