Un grupo de cuatro casas terreras de la calle Molino de Viento ha caído este lunes bajo la piqueta. Las viviendas, que estaban situadas a la altura del colegio Aguadulce en el tramo más cercano de la vía a la plaza de La Feria, darán paso a un solar, según ha podido informar la constructora. Estos edificios de tan solo una planta sirvieron como prostíbulos hasta hace cinco años, apuntan los vecinos. La retirada paulatina de este tipo de actividad de las calles de Arenales está propiciando una lenta reconversión urbana del barrio; un proceso en el que las antiguas casas obreras, las cuales se remontan al cambio del siglo XIX al XX, han ido desapareciendo poco a poco.
