La capital grancanaria vivirá una víspera de Reyes totalmente atípica por culpa de la pandemia. Con la intención de evitar aglomeraciones, la Policía Local vigilará la zona Triana, entre otros puntos de la ciudad, con un dron y con la presencia de un mayor número de agentes durante la tarde noche de este 5 de enero. No habrá cabalgata, conciertos o barras en la calle, pero el comercio y la restauración tienen previsto abrir hasta prácticamente la media noche, por lo que autoridades y empresarios esperan que numerosas personas acudan a estas zonas para disfrutar de una jornada en la que Melchor, Gaspar y Baltasar irán por toda la ciudad en carrozas, aunque el Ayuntamiento no ha querido desvelar el recorrido exacto.

Hace un año la Calle Mayor y sus aledaños congregaron a unas 50.000 personas, quienes generaron 16.500 kilos de basura, según cálculos del Consistorio capitalino. Y es que la noche de Reyes se ha convertido en un fecha señalada en el calendario. Ante tal precedente, la concejalía de Seguridad y la asociación Zona Triana llevan meses negociando cómo garantizar que la visita de Sus Majestades de Oriente a la ciudad no se convierta en posibles brotes de contagios de Covid-19. Ambas partes han acordado el despliegue de un dispositivo especial que permita el buen discurrir de la jornada, sin conciertos, barras, ni ningún tipo de dinamización comercial o de ocio en la calle.

Representantes de Melchor y Baltasar por las calles de Alcaravaneras el pasado fin de semana

Según explicó ayer el concejal de Seguridad, Josué Íñiguez, desde por la mañana habrá un dispositivo especial de agentes patrullando las principales zonas comerciales de la capital, con una mayor incidencia en el entorno de Triana. En un primer momento efectivos de la unidad de participación ciudadana irán por los distintos establecimientos recordando a los empresarios la necesidad de mantener la distancia social, respetar aforos y el uso obligatorio de mascarillas. Pero el momento de mayor afluencia de público se espera al caer el sol.

Íñiguez indicó que a lo largo de la tarde noche se irán incorporando distintos grupos patrulla “de manera escalonada”, quienes permitirán disolver posibles tumultos o aglomeraciones, a las tres, a las seis y a las nueve, aproximadamente. Así hasta llegar a la una de la madrugada, momento en el que entrará en vigor el toque de queda hasta las seis de la mañana. Triana y Vegueta estarán en el punto de mira, pero también habrá una especial atención a posibles aglomeraciones en torno a Mesa y López con Ruiz de Alda o la plazoleta Farray.

“El dron será un recurso más de la Policía para realizar estas labores”, apuntó Íñiguez. Tras obtener los permisos pertinentes por parte de la Delegación del Gobierno, este aparato sobrevolará las zonas comerciales en busca de posibles tumultos o aglomeraciones. “Es una herramienta muy útil, en verano ya pudimos comprobar que cuando este se acercaba en las playas a una zona donde la gente incumplía las normas, estos se separaban o colocaban las mascarillas, sin necesidad de acercarse los agentes de a pie”, explicó el edil. “Volará por un sitio u otro en función de las necesidades que vayamos viendo”, puntualizó.

Lo cierto es que agentes de la Policía Local ya se vieron obligados a despejar la plaza de las Ranas en la noche del pasado 1 de enero, día de Año Nuevo, cuando un grupo de jóvenes estaban celebrando allí un botellón sin respetar las medidas de seguridad sanitarias decretadas por el Gobierno de Canarias. Es más, el edil señaló este lunes que durante el día de Navidad también intervinieron en este mismo punto.

Precisamente, los empresarios de la zona señalaron que, año tras año, el “principal” problema de la noche de Reyes se encuentra en los botellones “de la chiquillería”. Según Carlos Bethencourt, presidente de la asociación Zona Triana, hay tres puntos donde habitualmente se producen concentraciones de jóvenes con bebidas cada 5 de enero: la plaza Hurtado de Mendoza -las Ranas-, la plaza Stagno -en la trasera del teatro Pérez Galdós-, y la plazuela en la confluencia de Munguía con Francisco Gourié. “Rogamos al Ayuntamiento más presencia policial efectiva en estos lugares”, subrayó. Eso sí, sin descuidar otros lugares como pueden ser la Alameda de Colón o el final de Triana con San Telmo.

Representantes de Melchor y Baltasar por las calles de Alcaravaneras el pasado fin de semana

Bethencourt adelantó que algunas tiendas del comercio minorista abrirá hasta prácticamente la media noche. Un horario que compartirán con los bares y restaurantes, pues según la normativa Covid-19 no deben admitir nuevos clientes más allá de esa hora. “Los establecimientos van a cumplir escrupulosamente con todas las medidas sanitarias”, señaló el representante de los empresarios de Triana.

Según Bethencourt, el momento “más preocupante” será precisamente a partir de esa hora, cuando la gente decida volver a sus casas antes del toque de queda. El concejal de Seguridad indicó ayer que tendrán en cuenta esta situación. Mientras que desde Guaguas Municipales han explicado que no habrá un dispositivo oficial ante la ausencia de eventos en la calle pero que, aún así, de producirse un fuerte incremento de la demanda hay un retén de vehículos para reforzar las líneas que más pasajeros mueven.

Lo cierto es que durante todo el lunes las colas para acceder a tiendas, grandes almacenes y centros comerciales de la capital estuvieron a la orden del día. Y es que muchos apuraron sus compras de Reyes hasta el último momento. Mientras, los pajes de Sus Majestades de Oriente recorrían algunas de las calles de los distritos Centro y Ciudad Alta para llevar así hasta los hogares capitalinos la alegría y magia de la Navidad.

Como broche final, Melchor, Gaspar y Baltasar, acompañados de su séquito real, recorrerán en carrozas durante la tarde de este martes y de mañana miércoles las calles de los barrios de la capital; eso sí, el Ayuntamiento no desvelará el recorrido para evitar tumultos, por lo que las familias y en especial los más pequeños de la casa se llevarán la sorpresa cuando escuchen a la comitiva llegar.

TRIANA RESISTE ANTE LA CRISIS

Los comercios de la Zona Triana han resistido ante la crisis económica que ha seguido a la pandemia, según adelantó ayer Carlos Bethencourt, presidente de la asociación de empresarios de Triana. “En relación a 2019, los establecimientos que mejor han salido parados han perdido tan solo un 2% del volumen de negocio, mientras que los que peor entre un 10 y 12%”, detalló. Es más, especificó que los comerciantes han podido recuperar durante la campaña de Navidad buena parte de lo perdido en meses anteriores, especialmente en noviembre, periodo que calificó de “muy duro”. Bethencourt afirmó que esta situación ha sido posible gracias a una “cierta reticencia” hacia los centros comerciales cerrados, las obras de peatonalización de Mesa y López y la apertura del aparcamiento de San Bernardo. “Hemos llevado la cuenta y ha estado lleno casi todos los días desde su apertura -en diciembre de 2019-”, apuntó el empresario, quien definió a esta zona como “una válvula de escape” frente a otros espacios que la población asocia a una mayor posibilidad de contagio. | A. V.